- El tejido de las alianzas estratégicas nacionales y locales que determinará a los triunfadores.
- La dispersión de la izquierda, el continuismo de 18 años y la debilidad de los grupos estatales.
- Los temas de la agenda pendiente: educación, combate a la desigualdad, empleo y seguridad.
El 2016 representa para Zacatecas desde la perspectiva política una etapa simbólica de cambio de gobierno y en razón de que tendremos en el mes de junio próximo unas elecciones que estarán determinadas por la conformación de bloques partidarios, es que podríamos asistir <con un elevado índice de probabilidad> a un proceso inédito de redistribución del poder público entre grupos, expresiones, dinastías y franquicias, distinto al registrado en los últimos 18 años en la historia de nuestro Estado.
La conformación de coaliciones partidarias en Zacatecas, decantadas todas en el escenario de las mesas de negociación instaladas en el centro de la república, han dejado a las fuerzas políticas locales en el nivel de la influencia anecdótica y testimonial, rebasadas en su estructura, lo que revela que será el componente del rejuego estratégico de las prioridades nacionales, el factor que será decisivo y protagónico.
Esto nos conduce a una realidad incuestionable: Las elecciones del 2016 para renovar las gubernaturas en trece entidades del país, entre las que se encuentra Zacatecas, no se agotan sólo en la enconada lucha de los grupos estatales, en las particulares obsesiones de las cofradías burocráticas y en las intenciones de los mandatarios locales, sino que trasciende esa lógica (va más allá de tal circunstancia), para atender y observar otro componente de gran importancia asociado con las tareas de consolidación de la gobernabilidad y la gobernanza nacional.
Por lo pronto, en Zacatecas se han avalado e inducido ya, desde los espacios de la negociación y los acuerdos nacionales, tres grandes núcleos de competencia electoral: El primero está representado por el eje izquierda-derecha, integrado por la alianza PRD/PAN; el segundo lo conforman los institutos autollamados del centro/progresismo (PRI/PVEM/PANAL) que han dado vida jurídica a la coalición “Primero Zacatecas”; y la tercera alternativa la firman el conjunto diverso de opciones de “izquierda” que, por circunstancias particulares, han decidido participar en estos comicios solos, entre los que se localizan al Movimiento de Regeneración Nacional(MORENA), Movimiento Ciudadano (MC) y el Partido del Trabajo (PT), entre otros.
El perfil de la competencia electoral de este año en Zacatecas que se desarrollará con la participación específica de varios bloques partidarios, por un lado, y por otro, con la inexplicable dispersión de las denominadas fuerzas de izquierda, podría conducir al final de la jornada a una novedosa e inédita redistribución del poder público, con signos diferenciales a los registrados en los últimos tres sexenios en la entidad.
Esto indica que los nombres definitivos de los candidatos al gobierno de Zacatecas, sobre todo él o los de carácter hegemónico, se procesarán en los siguientes días, sujetos invariablemente a la dinámica de los acuerdos nacionales, producto de las mesas de negociación en los que participan casi todos los partidos políticos.
LOS FACTORES PARA OBTENER EL TRIUNFO EN LOS COMICIOS PRÓXIMOS
Los componentes claves para obtener el triunfo en las elecciones del mes de junio serán varios y destacan los siguientes: 1).- el perfil del candidato, su trayectoria y prestigio, oficio, sensibilidad, honestidad y capacidad de gobierno; 2).-la propuesta y el contenido de su plataforma; 3).-El equipo que le acompañe; 4).-la estructura de organización y movilización de la conciencia ciudadana; y 5).-las alianzas estratégicas locales y nacionales.
En la actual época de crisis de representación que vive el sistema político, la formación de sólidas coaliciones, <con alianzas que sumen, no que resten>, será divisa básica para aspirar a la conquista del triunfo electoral. El aislacionismo con el que actúen los Partidos en estos comicios se convertirá en el mayor riesgo que pudiera sellar el horizonte de las probables anticipadas derrotas. Por cierto, la izquierda de origen doméstico, dispersa y pulverizada, hoy enfrenta las sombras de ese fantasma.
Los más importantes teóricos y estudiosos de la ciencia política (entre ellos Giovanni Sartori, en su libro Partidos y Sistema de Partidos) han dicho que “el principal rasgo distintivo del pluralismo moderado es el gobierno de coalición”.
Un factor adicional que pudiera marcar otra diferencia positiva en esta contienda electoral es la forma en que los competidores presenten a la ciudadanía propuestas razonables y convincentes para abordar los asuntos pendientes de la agenda para el desarrollo del Estado, como son los temas a favor de una educación de calidad (no resuelto a la fecha y con grandes rezagos), el combate a la desigualdad y la pobreza, el diseño de un nuevo paradigma económico más dinámico y justo, la generación de empleo digno y la disminución de los indicadores de inseguridad, entre otros.
PROCESO ELECTORAL, LA SEGURIDAD CIUDADANA Y LAS FUERZAS ARMADAS.
Fresnillo ha sido en la historia reciente un enclave municipal distinguido y mediado por la persistente violencia criminal. Se ha convertido en territorio de enconadas disputas libradas entre integrantes de los diferentes cárteles del narcotráfico. La población ha demandado y exigido en reiteradas ocasiones la presencia de las fuerzas federales de seguridad para resolver este agudo problema.
El gobierno de la Federación ha respondido una vez más a dicha exigencia y coincidente con el inicio del 2016, año eminentemente político/electoral, se puso en funciones el programa “Fresnillo Seguro”, con la participación de más de 500 efectivos del Ejército, La Marina Armada de México, la Policía Federal y otras corporaciones de seguridad pública, que resguardarán al Mineral y sus comunidades, para garantizar un clima de tranquilidad en este municipio que es estratégico para el desarrollo de Zacatecas.
La Federación ha tomado la determinación de no tolerar que las mafias del crimen organizado perviertan, distorsionen e influyan en el proceso democrático de las elecciones del mes de junio próximo. ¿Se logrará el objetivo? El tiempo lo dirá.