(¿? 1924 – Ciudad de Zacatecas, mayo de 2006)
Marco Antonio Flores Zavala
Agustín Díaz Lorck, (a) El Molinillo, era parte de la familia que tiene como referentes al doctor Tomás Lorck Ávila —(ciudad de Zacatecas, 1853–1912) impresor, médico, profesor en el Instituto Literario, diputado local, primer director de la Dirección de Instrucción Pública en el estado—. El otro indicador familiar es Tomás Lorck Frutos, político antirreeleccionista e integrante de las sociabilidades que se autodenominaban obreros, socialistas, liberales y finalmente cercanos a las agrupaciones antecedentes del Partido Revolucionario Institucional, laboró en el ayuntamiento como secretario y responsable del Registro Civil.
Apreciamos a Agustín, hijo de político y funcionario municipal, alguien que tuvo comodidades sociales, en su transcurrir juvenil y formación académica. Estudió en la ciudad familiar y en la capital del país, en la prestigiada Academia de San Carlos. Residió temporadas allá y en Zacatecas.
Quienes lo trataron señalan que padeció represiones, encarcelamientos, insultos, degradaciones sociales. Pero, también se cuenta que su transcurrir asumía sin tapujos su orientación sexual. El Molinillo era gay.
En las comunidades de la diversidad, que entonces eran discretas y con lugares tal, era uno más. En la bizarra capital del estado impartió clases de arte —danza, vestuario, pintura, asesoría de imagen—, pintó en cuadros de caballete, y decoró edificios, lo más reconocido es el plafón del Teatro Fernando Calderón.
Participó en la investigación del baile de Mexicapan, con estuvieron los maestros Julio M. Salinas y el pianista Cleofás de la Rosa, los coordinó el profesor Luis de la Fuente. En el grupo de investigación “participó la señora María Dolores Ortega de García, que tenía su taller de costura en la calle de la Victoria”.
Era un personaje de la diversidad zacatecana —están incluidos los heterosexuales, mujeres y hombres—. Se notaba su transcurrir distinguido por su cuerpo enjuto, el peinado, algunas veces con cartera grande y otras con bolso. Su ir por la avenida Hidalgo no pasaba desapercibida, más cuando caminaba y fumaba con pitillos, era un actorazo para sí.
Hoy día en la Casa Municipal de Zacatecas están dispuestas algunas de sus creaciones, retratos y ensayos de anatomía. Carentes de fichas técnicas, uno debe saltar de los retratos a paisajes, de los bocetos sobre fotografías a los cuerpos en movimiento hechos con lápiz sobre cartón. Sin información del artista y de las imágenes, uno percibe el silencio de las épocas de Agustín Díaz Lorck.
Imagen: retrato de Agustín Díaz Lorck (a) El Molinillo. Fotografía tomada por Carlos Segura en 1992.