Los días 28 y 29 de octubre del año en curso, Andrés Manuel López Obrador visitó Zacatecas y Aguascalientes, respectivamente. El dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), nos dejó claro que este Movimiento está de pie y en pie de lucha contra los malos gobiernos, la corrupción, la pobreza, el desempleo, la violencia y la descomposición social que imperan a lo largo y ancho del país. 

La visita de AMLO, también dejó claro que MORENA no es más de lo mismo, ni es como los demás partidos, por más que se empeñen en seguir intentando desprestigiarnos. Zacatecas Capital es la más clara muestra de ello. El líder nacional de MORENA, puntualizó que no iríamos a la elección extraordinaria y que aquellos militantes que participaran en ésta, serían expulsados, ¿por qué?, porque a pesar de que nos arrebataron y robaron el triunfo del Municipio de manera descarada, nosotros tenemos principios. Al no acudir a una elección que está amañada, viciada y truqueada, les decimos a la mafia de la política del Estado que no somos igual que ellos, le demostramos a los ciudadanos que a nosotros no nos mueve el afán de dinero o los cargos públicos. 

Y en efecto, nuestra lucha es por el cambio a través de la vía pacífica y electoral. Para ello, hay que organizarnos, sólo de esta forma podremos resistir los embates de las reformas neoliberales, apoyar las demandas populares e impulsar el cambio verdadero.

Tanto en Zacatecas, como en Aguascalientes, la respuesta de la gente fue muy buena. Cada día, este movimiento se fortalece más y más, lo cual se ve reflejado en todos los sondeos de opinión que se hacen, y donde el resultado es contundente: la gente votaría por López Obrador para la elección presidencial de 2018. 

Por eso, la visita de Andrés Manuel ha dejado claro que tenemos que seguir organizando a la gente, informándola y generar en ésta un pensamiento crítico y solidario, para que el día de mañana, que ya está a la vuelta de la esquina: el 2018, le demos un nuevo destino de la Nación con empleo, bienestar, justicia, soberanía, independencia, respeto a los derechos humanos, seguridad, tranquilidad y paz social.

El reto, bien vale la pena. Nada ni nadie nos detendrán, quienes hasta ahora en dos ocasiones le han robado la esperanza y el anhelo a la gente de tener un gobierno honesto y que cumpla con su palabra, ya se toparon con pared. La tercera es la vencida, y en el 2018, les guste o no, ¡Van para fuera!