ARTURO NAHLE OFRECE UNA DISCULPA PÚBLICA

Share on FacebookTweet about this on TwitterShare on Google+Pin on PinterestShare on TumblrShare on LinkedInEmail this to someone

MENSAJE DEL MAGISTRADO ARTURO NAHLE GARCÍA, PRESIDENTE DEL TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL ESTADO

A LA TITULAR DE LA SECRETARÍA DE LAS MUJERES
A LAS DIPUTADAS DE LA H. LXIV LEGISLATURA DEL ESTADO A TODAS LAS MUJERES DE ZACATECAS


El pasado 29 de noviembre el titular del Poder Ejecutivo presentó a la H. Legislatura del Estado el denominado Paquete Económico para el ejercicio fiscal 2022, incluido por supuesto el proyecto de Presupuesto de Egresos.


Debo decir que en dicho proyecto me sorprendió sobremanera que para el Poder Judicial del Estado se propone una cantidad muy distinta a la que por escrito se convino con la Secretaría de Finanzas después de largas horas de trabajo con funcionari@s de esa dependencia sobre el denominado “gasto irreductible”, o sea salarios y gasto operativo (agua, luz, teléfono, papelería, combustible, rentas y otros conceptos menores).


La reducción que se plantea en la iniciativa llega al extremo de que no solo se reduce el presupuesto convenido, se reduce incluso respecto al que tuvimos autorizado para este año y que, por cierto, no se nos ha entregado al cien por ciento, tenemos adeudos importantes que debemos saldar.


Lo primero que hice fue solicitar a través de la Secretaria General de Gobierno y del Secretario Particular una audiencia urgente con el señor Gobernador a quien le agradezco me haya atendido de

inmediato; de manera afable y perfectamente entendible me dijo que a esa hora ya no podía modificar el proyecto, que lo intentara entonces con las señoras y señores Legisladores.
Eso es lo que he venido haciendo, he platicado personalmente sobre nuestras necesidades básicas con Diputadas y Diputados de todos los Partidos, solicité formalmente audiencias con las Comisiones de Presupuesto y de Régimen Interno y Concertación Política, el sábado me reuní con la primera y hoy con la segunda.


Pero el tema presupuestal, como cada año, es materia de debate público, los medios de comunicación dan cuenta puntual de como vienen las cosas para el próximo año y solicitan el posicionamiento de los sectores e instituciones involucradas; no hay un solo medio que no me haya buscado y a todos, como siempre, los he atendido y les he dicho la verdad: que el proyecto de presupuesto no viene bien para el sector Justicia.


El miércoles 1° de diciembre me entrevistó en vivo el periodista Francisco Esparza en su programa matutino de Estéreo Plata, y me preguntó: “¿a qué se debe, desde tu punto de vista, esta reducción tan ilógica al presupuesto del Poder Judicial?” (sic) mi respuesta fue: “no lo sé…porque el presupuesto global está creciendo un 11.6%, no sé con qué criterio a unos le suben y a otros le bajan, pero yo ahí no me meto, que cada quien defienda su presupuesto” (sic).
Atribuí las cosas a un posible “error de dedo, a un error mecanográfico, alguien ahí en lugar de un 8 o un 9, puso un 3” (sic). Palabras más palabras menos dije: “me resisto a creer que en estos tiempos de violencia desbordada se le reduzca su

presupuesto justamente a las instituciones encargadas de investigar y castigar el mundo de delitos de alto impacto que a diario se cometen en Zacatecas” (sic). Y agregué: “debe ser un error que afortunadamente las Diputadas y Diputados pueden y deben corregir” (sic).
“Ni tú crees que fue un error” (sic) me dijo el entrevistador, yo insistí: “quiero creer eso Pancho, no quiero pensar mal, no quiero pensar que es un error político…” (sic).


Después que le relaté la situación física de los 73 Juzgados y otros órganos jurisdiccionales que tenemos, así como el incremento de las cargas de trabajo que justifican plenamente el aumento que solicitamos, Pancho insistió: “por eso yo no creo que sea un error de dedo, si creo en la mala leche” (sic) Yo seguí en lo mismo “yo sí, soy muy ingenuo, si creo que fue un error de dedo y que lo van a corregir los Diputados, creo que vamos a encontrar en ellos la sensibilidad y la inteligencia” (sic).
Y el periodista remató: “¿Cómo le llamarías tú, pendejada, irresponsabilidad?” (sic) Mi respuesta, evidentemente precipitada, fue: “Es una pendejada de una mecanógrafa que hay que correrla, a lo mejor estaba distraída…el Gobernador me ha dado un trato extraordinario, por eso te digo que seguramente es un error de alguien… no hay otra explicación aceptable, lógica, coherente… en el Poder Judicial hay respeto y toda la disposición a la colaboración y coordinación entre Poderes, estoy seguro que habrá correspondencia y reciprocidad” (sic).

La entrevista concluyó invocando la flagrante violación al principio constitucional y jurisprudencial de irreductibilidad y progresividad presupuestal a los Poderes Judiciales.


Con plena justificación, la titular de la Secretaría de las Mujeres y posteriormente Diputadas de esta Legislatura protestaron por mis palabras, me comuniqué de inmediato con la Secretaria para solicitarle una audiencia y explicarle el contexto y sentido de mis expresiones, no he tenido la suerte de ser recibido y escuchado, por eso ahora lo hago a través de este comunicado.
Es de humanos equivocarse y yo me equivoqué, lo acepto, para eso es esta rueda de prensa, para reconocer sincera, humilde y públicamente que me equivoqué, que nunca debí presumir que esta situación tan delicada es producto del error de una mujer; le ofrezco de todo corazón una disculpa a cualquier mujer, mecanógrafa o no, que se haya sentido aludida y ofendida por mis palabras, jamás fue esa mi intención.


Hasta hoy supe que los números -que evidentemente están mal-, efectivamente son producto de un error, pero no de una mujer, sino de un hombre, no mecanógrafo, sino de alta jerarquía; espero que él también, con valor civil, lo reconozca, explique y ayude a enmendarlo.
Tengo esposa, hija, nieta, hermanas, sobrinas huérfanas, amigas y compañeras de trabajo que merecen todo mi respeto, consideración y cariño. En el seno de mi familia hemos vivido en carne propia no violencia verbal o política sino la más extrema de las violencias hacia una mujer, el peor de los delitos y que por cierto

quedó impune, si no lo sabré. Por eso junto a mujeres admirables y comprometidas con sus causas como Aída Alicia Lugo y Mara Muñoz, en 1999 impulsé la creación del Instituto de la Mujer Zacatecana (hoy Secretaría de las Mujeres) y en el 2014 el Centro de Justicia para las Mujeres de la Fiscalía General de Justicia.
También por eso en el 2012 impulsé la reforma integral más importante al Código Penal de Zacatecas que, entre otras cosas, tipificó por primera vez en la historia del Estado el delito de Feminicidio e incrementó las penas a los delitos en los que las víctimas casi siempre son mujeres.
Trabajo orgullosamente y de tiempo completo en una noble institución conformada mayoritariamente por mujeres donde resolvemos, con perspectiva de género, miles de juicios de Divorcio, Alimentos, conflictos por la custodia y convivencia de las y los hijos, casos de Abandono y Violencia Familiar, Delitos Sexuales, etcétera, donde casi siempre las víctimas son mujeres, muchas de ellas menores de edad o de escasos recursos para poderse defender.
Por eso mi lucha por un mejor presupuesto para el órgano jurisdiccional que les hace Justicia, no estamos pidiendo recursos para aumentar sueldos a los mandos superiores, para privilegios o gastos suntuosos, solo pedimos lo estrictamente necesario para poder prestar este servicio público esencial y transitar hacia la reforma profunda a la que nos convocó el señor Gobernador el día de su toma de posesión.

Pedimos recursos para dignificar los espacios en los que se imparte justicia y que están en un estado francamente lamentable, pedimos recursos para renovar nuestro caduco equipo informático y transitar hacia los juicios en línea, pedimos recursos para renovar una parte de los vehículos que utilizan nuestros actuarios y notificadores y que ya son una verdadera chatarra, pedimos recursos para construir solo la primera etapa del archivo público más grande y dinámico que tiene el Estado.
La respuesta fue que no hay recursos, y lo creí, soy de buena fe, quizás ingenuo, jamás imaginé que alguien se atrevería a mentirle a quien representa a uno de los tres Poderes en que se sustenta nuestro sistema político; y así, engañados, aceptamos retirar nuestros proyectos y aceptamos, por escrito, el denominado “gasto irreductible”, y ni eso se está respetando, ¡qué lamentable!
En el Poder Judicial de Zacatecas estamos cien por ciento a favor de la austeridad a la que nos ha convocado el señor Presidente y el señor Gobernador, no la predicamos, la practicamos. Ninguna Magistrada o Magistrado, ninguna Jueza o Juez tiene vehículo oficial asignado, ni chofer, ni escoltas, ni nada que se le parezca; a diferencia de otras instituciones con nosotros nadie, ni yo, está autorizado para consumos en ningún restaurante o bar con cargo al presupuesto del Tribunal Superior de Justicia.
Somos 1,113 servidoras y servidores públicos modestos que en su gran mayoría son funcionari@s de carrera judicial: Secretari@s de Acuerdos, Proyectistas, Actuari@s, Auxiliares, Peritos, Mediador@s, en fin, zacatecanas y zacatecanos que obviamente nos preocupa la situación por la que atravesamos y lo único que pedimos son mejores herramientas para seguir sumados al

combate de lo que creemos son las principales causas de la inseguridad: la desigualdad y la impunidad.
Dejo a ustedes, señoras Diputadas y mujeres todas, mi disculpa, pero también mi respetuosa y reiterada solicitud de que analicemos juntos, de manera seria y responsable, el presupuesto 2022 de una institución que con 196 años de vida ni a edificio propio llega. Muchísimas gracias.
Zacatecas, Zac. Diciembre 6 del 2021

Deja un comentario