En México hay diputados locales que invaden funciones que les corresponden a los gobernadores, hacen uso indebido de recursos públicos, realizan una mala planeación del gasto y asignan de manera discrecional los presupuestos y el capital humano al interior de los congresos estatales. Estos son los hallazgos más importantes del Informe Legislativo 2018 del Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (IMCO).
Los diputados locales, un total de mil 124 en el país, rara vez son estudiados y llamados a rendir cuentas. A partir del análisis de 65 marcos normativos, 32 tomos de cuenta pública, 32 portales electrónicos y 800 solicitudes de información a los congresos estatales se construyó una base de 4 mil 960 datos verificados y comparables. Con este acervo de información cuantitativa, el IMCO analizó cómo se puede avanzar hacia tener congresos locales más austeros y profesionales.
Como resultado del trabajo de investigación se exponen cuatro ventanas de oportunidad:
1. PROFESIONALIZACIÓN DE LOS CONGRESOS
“El acceso a personal parlamentario profesional e independiente es el recurso más valioso con el que un parlamentario puede contar”[1].
Hay 24 congresos que contemplan en su marco normativo el servicio profesional de carrera (SPC), pero únicamente en cuatro aplican dicho servicio. EL SPC debe considerar:
- Ingreso por concursos.
- Capacitación continua.
- Promoción al interior de las legislaturas.
- Derechos y responsabilidades laborales.
Los congresos locales tienen la responsabilidad de hacer rendir cuentas al Ejecutivo estatal sobre la ejecución de políticas públicas, el control del gasto y la aprobación del presupuesto. Apenas ocho congresos locales consideran centros de estudios de finanzas públicas en su ley orgánica. El resto de las legislaturas no cuentan con la debida capacidad técnica para detectar con oportunidad variaciones injustificadas de gasto y llamar a la rendición de cuentas a los funcionarios responsables.
2. INVASIÓN DE FUNCIONES DE LOS GOBERNADORES.
En 2017, 25 congresos locales gastaron mil 915 mdp en “ayudas sociales”, las cuales no forman parte de las funciones de un legislador. La ley no los habilita a dar despensas o juguetes, ni ofrecer fiestas o ayudas económicas, y tampoco a construir obra pública. Aun así, la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) y el Congreso del Estado de México ejercieron en ayudas sociales 576 mdp. Esta cantidad es superior a lo ejercido por cinco gobiernos estatales en ayudas sociales (Aguascalientes, Baja California Sur, Nayarit, San Luis Potosí y Tlaxcala).
3. AUSTERIDAD ¿DE PROMESA A REALIDAD?
Estas son algunas de las propuestas realizadas por legisladores federales de Morena:
- Ajustar el presupuesto entre un 25% y 40%.
- Suprimir partidas a grupos parlamentarios y comisiones
- Eliminar la práctica del “moche”.
- Reducir comisiones legislativas, contratos por honorarios y viáticos.
- Eliminar gastos de seguros médicos, telefonía celular, vales de gasolina y comida, uso de vehículos y contratación de despachos.
La propuesta de Morena presenta una oportunidad única para tener una discusión nacional y contar con congresos locales eficientes y austeros.
Un ejemplo de esta mala práctica es que la Asamblea Legislativa del Distrito Federal es dos veces más cara que el Congreso de los Diputados de España.