El personal recorrieron por el Centro Histórico para verificar los daños que causó el fuerte torrencial que cayó sobre la ciudad la noche del jueves, que causó daños en calles y callejones, inundaciones de 30 centímetros a más de un metro, afectó la circulación en arterias y el boulevard Adolfo López Mateos, y varios establecimientos comerciales de las avenidas Hidalgo y Juárez.

Un daño más notorios de la lluvia fue el levantamiento del pavimento de concreto en unos 35 metros cuadrados frente al hospital del IMSS sobre la avenida Torreón, y la inundación de ese inmueble.

Miguel Félix, secretario de Servicios Públicos, informó que se apoya con equipo y personal para limpiar las calles de la ciudad que se vieron afectadas, y retirar el lodo con camiones cisterna.

La presión del agua levantó el concreto, pero esta mañana ya funciona la bóveda nueva que se construye sobre la Alameda con la remodelación de la misma, lo que vendrá a aliviar los problemas de fluidez del torrencial, y que permitirá dar un mejor cauce al agua que baja de las colonias, Bancomer, Lázaro Cárdenas y calle Quebradilla.

Se llamó a la población para que en materia de prevención de estos daños como el que se presentó, no tiren basura en las calles, principal causante de que las alcantarillas se tapen.

Desde anoche elementos de Protección Civil trabajaron de manera ardua para atender la contingencia, principalmente rescatando a gente que quedó atrapada en sus vehículos, reportándose alrededor de 40 personas que tuvieron que recibir apoyo.

Además de ayudar en el retiro de escombro acumulado sobre las vialidades y calles, así como piedras grandes que fueron arrastrados por la corriente, y realizando limpieza tanto en el Hospital del IMSS, como la avenida Torreón, Chepinque, cerca de la Máquina 30-30, así como en la zona de tiendas departamentales.

Se realiza también un diagnóstico, ya que en algunos lugares de la periferia se reportó daño en el alumbrado público.