Y no vino Ronaldinho -¿Así se escribe?- el caso para muchos hinchas era verlo, aunque no jugara, se especuló si estaba alojado en hotel diferente al resto de sus compañeros. Pero no vino, muchos intentaron vender los boletos adquiridos con tiempo, finalmente alguien siempre va.

 

Fueron ambulantes, las ganas de ganarse la vida –pinche tendencia de uno- y los retiraron vía la fuerza pública, y se tomó la gráfica, pero, azoro vil, amenazaron al fotógrafo a la distancia. Cosas del pasado que parecen volver.

 

Los Mineros no decepcionaron, perdieron como casi siempre, si hubo lleno fue para ver al astro brasileño, algunos sugirieron en redes sociales poner una manta para que ante el lleno, por lo menos la afición lo viera. Buena idea, pero tampoco se hizo…

 

Ya los diputados de la Comisión Permanente conocieron –públicamente lo dieron a conocer- la terna “C”, para designar un comisionado integrante de la Comisión Estatal de Acceso a la Información Pública (CEAIP),y está integrada por Norma Julieta del Río, Francisco Gutiérrez Reynoso y María Teresa Villegas Santillán, el cargo será por siete años, y no será reelecto.

Y la segunda para el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas, aparecen dos ampliamente vinculados al Derecho Electoral: Edgar López Pérez-actualmente magistrado electoral-  Alicia Contreras Chávez y Esaúl Castro Hernández –fue asesor del IEEZ-.

La suerte echada a los astros, si bien confusa, dicen que será por el de Pinos –ah, claro, claro, Edgar López, pero los astros pueden equivocarse, con Julieta del Rio están fuertes, sabe la jugada-.

Y la UAZ, su personal académico, decide por la huelga, a las veinte y treinta y tantos minutos, se terminó de contar; así que de estallar será este miércoles 18 de febrero a las 12:00 horas. Votaron un mil 910 profesores de un padrón de tres mil 060.

 

¿Dónde quedaría el resto? Fueron un mil 421 profesores a favor, en contra 477, nulos, 12. Así. Si bien –sólo parece- algunos no estaban de acuerdo, pero es una decisión legal, tomada en forma –y asúmase que formalizada, claro- para empezar a ejercer el derecho de huelga.

 

A favor de la educación pública, sin pensar en el alumnado, lo que sea, subyace no muy en el fondo que la universidad pública de Zacatecas requiere orden, y eso parece urgente, porque no se puede ni se debe desconocer el derecho de todos a recibir educación púbica de calidad.

 

En el inter están los derechos laborales de los profesores ¿Cuánto puede durar? Ya dependerá de la Rectoría y “con absoluto respeto a la autonomía” de lo que el estado afloje, que esa es la otra historia. Por lo pronto, ya está…

 

El recuerdo, de repente, pone en la mente las vacaciones de verano o los fines de semana en Samalayuca, ahí el grato recuerdo son los médanos, revolcarse en ellos,  y el chingo de arena en todo el cuerpo, sobre todo en los pantalones, como a los incautos en la playa

 

Parece una sombra en la memoria, pero era n pueblo no muy grande –le cuentan al tundeteclas que ahora es parte de Ciudad Juárez- y estaba retirado, más de 45 kilómetros de la zona entonces zona urbana. Estamos en los setentas del siglo pasado, el XX.

 

Hasta las papitas –nombre genérico en México para todo tipo de fritanga- eran pocas, la gringas pululaban, pero no mucho en esa zona, alguna Coca Cola “chiquita” y listo, era la delicia del día. Era y es zona calurosa, extremosa, puede decirse.

 

Papá lo subía a uno a uno de los médanos y luego aventarse era delicioso, pero nunca hubo un juego de ropa extra para eso y siempre era el camino de regreso sin posarse en el sillón trasero del automóvil. Y no estaba tan cerca dela hoy casi casi zona vieja de Ciudad Juárez.

 

Es uno de los puntos para alimentar la necia memoria del tundeteclas… faltará compañero de aventura, pero poco a poco… como pare recordar le estancia en la nevería Acapulco, que aún existe, y los padres recordaban de sus mocedades, ahí el tundeteclas compraba las revistas de monitos de Chanoc –los medio costeños algún héroe local teníamos-.

 

A lo mejor preguntar como ahora, en redes sociales “alguien que vaya a…”. o llegar las increíbles flautas de Pali, ahí en la avenida De los Insurgentes, casi esquina con Cinco de Mayo –a lo mejor a algún escribidor jalpense se le antoja la idea-, por no hablar de un burrito de salchicha o de chile relleno, claro que delos de los de Tony.

 

Más de un mil 500 kilómetros, se dice fácil. Eso de un punto del país… luego les platico, hoy no tengo ganas, pero venden garnachas… y en agosto la gente se tiraba confeti en el rostro.

 

El 18 de febrero es el miércoles de ceniza, en la tradición católica inicia la cuaresma, así que desde ya nos soplaremos chistes tan mamertos como si va uno a la tiznada… luego digan que no todo es cíclico…

 

Se puede leer en la red que “el miércoles de Ceniza recibe en la tradición litúrgica de la Iglesia el nombre de “miércoles al inicio del ayuno” (in capite ieiunii). Comienza con el austero rito de la imposición de la ceniza, y, de este modo, inaugura la Cuaresma. La Cuaresma representa, en el Año litúrgico, el ciclo de preparación a celebrar el misterio de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.

 

“El miércoles de Ceniza se halla estrechamente unido con la idea de la penitencia,  que ya se expresaba entre los hebreos cubriéndose la cabeza de ceniza y vistiéndose de aquel áspero paño llamado cilicio.

 

“Judit, antes de emprender la ardua empresa de liberar Betulia, “entró en su oratorio y, vestida con el cilicio, cubrió de cenizas su  cabeza  y,  postrándose  delante  de  Dios, oró” (Jud 9, 1). Jesús mismo, deplorando la impenitencia de las ciudades de Corozaín y de Betsaida, dice que merecerán el mismo fin que Tiro y Sidón, si no hacen penitencia con ceniza y cilicio (Mt 11, 21).

 

Así que de ahí viene en la tradición de recordar, incluso el origen, del polvo fuiste tomado y al polvo volverás… así que el martes de carnaval termina e inicia la época  de penitencia y reflexión.

 

También en lo elecotral, que pinshe coincidencia… Hasta para los votantes, será toda unma penitencia…

 

Sean felices, si quieren, sino, me vale madre, la verdad…