Mucha fiesta, pero aún con su octava decisión, Judit, no lo olvidará. Sí, en la octava. En el libro considerado, hoy, apócrifo por los no católicos, Judit ante la ocupación extranjera engaña al militar al cargo.
Le hizo creer que estaba enamorada de él, y entra en su tienda –de campaña, de guerra- lo hace beber, lo embriaga y cuando el general Holofernes cae dormido, Judit lo decapita, y siembra de esta forma la confusión en el ejército de Babilonia y obtiene de este modo la victoria para Israel.
Analogía, para el que entienda y haya leído el libro, pobre pero interesante analogía. El que tenga oídos, oiga.
Y la Legislatura aprobó, entre la obvia oposición de los aplaudidores del pasado, el ingreso. Sí, más impuestos, al menos en porcentaje. Sí más al consumo etílico en mesa, que no en proveeduría.
Aunque el diputado Osvaldo diga al escribidor, que para no este gandochin –chingando, al revés, para los que no entienden- el sábado iniciará la etapa de reparación de un tramo de carretera, el de Sauceda de la Borda a Guadalupe en la vialidad siglo XXI que quedó para la madre. Pinche ánimo de can.
Y la verdad es que el fresa, muy fresa, presidente municipal de Guadalupe y sus cien acciones de discurso, no arreglará, ni el gobierno del estado menos la federación, pero n el diputado gestionó –lo reconoce el escribidor – la primera parte de arreglarlos-, y bien, pero no como grata concesión sino como acción obligada a petición –bendición de tener la letra-… no todo es pobreza diputado que deja buenos dividendos.
Y en el principio era el verbo y el verbo actuó, con tal de que nadie se parta la madre en el lugar de maras, que pena que no fue descendiente de un funcionario para que lo repararan.
Y, dicho sea de paso, ahí están los abusos de autoridades a migrantes que vienen a Zacatecas. A ver que publican…
Y por lo pronto sean felices, si no quieren, miren al escribidor le tiene el menor de los sin cuidados.