Charlas Inútiles

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mariopadillaNo supe explicarme, fue la aclaración, pero no pasa semana sin que gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello, tenga un resbalón comunicativo o un accidente en el habla, o bien, que diga una cosa por otra. En una entrevista o bien en redes sociales.

Dentro de su explicación, dada el domingo en una entrevista con reporteros, el mensaje fue claro, las palabras no las más adecuadas en un momento áspero con la minería, cuando acepta, con ese viejo discurso noventero que el diálogo y etcétera son la clave para solucionar conflictos…

“En ese tenor, sostuvo que en todo momento se ha mostrado abierto al diálogo para tratar de llegar a acuerdos y añadió, por tanto, que la solución no se alcanza ‘tomando carreteras ni yendo a eventos a vandalizar. Creo que Zacatecas requiere tranquilidad, paz y que se aplique el estado de derecho’” (La Jornada Zacatecas).

Vandalizar.

Eso dista mucho de lo ocurrido la semana pasada, cuando los minero se manifestaron en un evento al que acudiría el gobernador y estarían autoridades del IMSS, en Fresnillo, justo frente a la sede del sindicato, en un momento aún más fuerte, y alguien, vaya uno a saber quién, lo mandó ahí, cerca de donde estaban los mineros.

Éstos, tal vez por “mostrar músculo” –expresión propia de los políticos clásicos de izquierda anquilosada ahora metidos a “periodistas”, salieron y demostraron que pueden echar atrás un acto público, con su una manifestación.

No en un acto vandálico.

Por partes, vandalizar es, de entrada, verbo transitivo, y  significa cometer acciones destructivas contra la propiedad pública.

Y eso, hasta donde uno recuerda, no ocurrió porque podrían considerarse actos vandálicos, algo que en Castellano son aquellas acciones perpetradas por una o varias personas, y que consisten en destruir y devastar todo cuanto se enfrente a su paso.

Destaca en eso la violencia, los blancos favoritos suelen ser inmuebles, como comercios, asas, escuelas o instituciones públicas, signo importante, la gravedad del daño que se infringe. A eso se le llama vandalismo.

Al explicar que no supo explicarse en relación al ofrecimiento de supuestos sobornos, el gobernador hizo un señalamiento también fuerte. Que lo diga cualquier otro, pasa, no un gobernador, que nadie se percató, también cuenta.

Ese martes 7 de febrero, Luz Domínguez acapilla con los diputados locales, para conocer los avances de la investigación de lo sucedido a una menor en la casa hogar, a ver si alguien le explica Derechos Humanos…

Sean felices, si no quiere, me vale madres…

 

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