Como no pasó antes, el tema de inseguridad nos llevó a los zacatecanos a lugares insospechados, como el nada honroso segundo lugar nacional como estado más violento, con un incremento de homicidios dolosos, que en los últimos meses pasó de dos diarios a casi cuatro.

La administración estatal está rebasada en el tema, no así, dicen, en el tema de recaudación, eso, si, lo hace Diferente.

En el pasado reciente, por no decir la pasada administración nació el tema entre los taxistas, de usar un botón de pánico que nadie instaló, pero que ayer como hoy, desde el gobierno se cree en cualquier cantidad de cosas.

Ahora se quiere recurrir a la ciencia ficción, tipo Star Trek, do que tiene un ”oficial científico de nuevas tecnologías”, que además funge como asesor y proveedor de tecnología del gobierno del estado, Raymundo Ceja, que sabe usar el talento de jóvenes en beneficio empresarial

De la venta de milagros al Niño de Atocha –no el de la delegación Cuauhtémoc-, llega ahora la idea, surrealista, de proveer una aplicación que el ciudadano ya debería poder descargar a su celular: Denuncia Ciudadana, Guardián Zacatecas.

Básicamente un botón de pánico en el celular.

¿Tiene algo de malo…? Si, en una ciudad y un estado en los que sin plan de datos de una compañía, no se tiene internet –menos conectividad, Miguel Alonso acabó con la red gratuita que dejó Amalia García vía convenio con Telmex-. C

Cuando logremos descargarla, se requiere tener internet, así que en caso de contingencia para un habitante: Espere señor delincuente, por favor, deje saco el celular, quito el boqueo de pantalla.

-No, no desespere, ya casi inicio la aplicación… ¿Se acuerda usted si el rojo es para bato y el rosa para dama? Creo sí ¿No? ¿No hay equidad? ¿Por qué la distinción?

El otro, arma en mano –es ficticio – mira casi con cierto aire de compasión al ciudadano.

-Listo, señor delincuente … no se dio cuenta ¿Verdad? Proceda a su chamba…

De lo que hay que enterarse…

Mientras, con SEMAR o sin ella, con todo a favor, la delincuencia., los homicidios siguen. Carajo es sí es ser diferente, porque no se acabaron…

¿Aún funciona la totalidad de las cámaras de seguridad instaladas? ¿Y las que se iban a instalar? Dijo aquél: Saaaabe.