La semana que inicia no parece que lleve giros o digamos sobresaltos, por lo menos en lo informativo, porque a nivel social todo sigue más o menos igual, será acaso la cercanía del periodo vacacional de la llamada semana santa, o será la notable ausencia de liderazgos en todos los ámbitos que en muy buena media impide tener un control sano.
Así cada uno puede hacer lo que mejor prefiera, brincarse las trancas, cambiar a otros proyectos cuando están en funciones, presumir autonomías cuando son meras consecuencias de las decisiones ya democráticas, ya unilaterales.
Y como lo de moda es emitir juicios, sin ver contenidos, cualquier posición puede parecer acertada. Parte de lo cierto es que en la mayoría de los casos, se prefiere aparecer, ser visto hasta el cansancio, que ir al fondo
Porque ahora la clase política tiene menos de clase, nada de política y sí mucho de declaraciones sensacionalistas en todos los niveles de gobierno. Ya muchos meuco piensan en lo que llaman proceso adelantado, cuando aún son meros devaneos. No da muy buen resultado esperar cosas a futuro cuando la realidad hoy en día cambia con mucha rapidez, y las fórmulas exitosas del pasado, no funcionarán en la actualidad.
Ambos modelos no son garantía de triunfo, pocos lo entienden así.
Bien podría uno preguntarse ¿Más o menos como a los cuantos mee se acaba el efecto de “como nunca ates…” “por primera vez en la historia…” o expresiones similares, para acabar ese culto a un modelo y a la personalidad? Las órdenes de odio contra los que en el 2009 se impusieron a un grupo, seguirán ahí. Es el sello, y dentro de ellos al menos otros saben que deben seguir otra estrategia.
La semana inicia sin muchos sobresaltos, conferencias flojonas, y temas, si bien muchos atorados en la basura legislativa de la historia que ahora busca como gastar, cada uno 100 mil pesos, en su difusión preferida, sin reglas, sin más bandera que la autonomía aunque con una ley que los obliga a no hacer eso.
Así, en la mayor opacidad que al IZAI, no le generó ningún tipo de incomodidad –es más divertido el turismo nacional transparente-, emocionados como están porque llegue Fabiola Torres, mientras los grupos parlamentarios se destazan al interior con pírricos desquites y posiciones dignas de Charlotte.
Sólo un partido, el Revolucionario Institucional, se posiciona, con un abuso informativo interesante, del resto se sabe poco… o nada. El Morena y su conflicto interno heredado de la otra expresión política, el PAN se felicita por triunfos, en el PAN se vuelven a inconformar por triunfos internos.
Contrato verde –volvieron a salir cuando ya no los recordábamos- y el hombre en los EEUU…
Algo sucede alrededor y es esa extraña sensación de que no sucede nada o como diría Charly García en Yo no quiero volverme tan loco … ¿Será que nuestra gente está muerta…?