ES EVIDENTE que se ha superado el falso debate respecto al festival “espectáculo” Vs “festival cultural” y que la presentación de agrupaciones musicales como la “Sonora Santanera”, le han otorgado a la edición 2013 de la máxima festividad un tono y un toque extraordinario.

EL TÉRMINO “cultural” se asoció durante mucho tiempo con la élite de grupos de procedencia generalmente clásica, sinfónica ¿O cómo debo denominarlos? Usted entiende y  por supuesto se trata de elementos indispensables pero no exclusivos para un festival como el de semana santa.

LA CULTURA, al final de cuentas, es lo que distingue a un pueblo en todas sus expresiones de vida, que incluyen, naturalmente, las manifestaciones popularmente entrañables, como es el caso, precisamente de la sonora cuya actuación fue magnífica.

¿RECUERDAN que en alguna edición pasada se presentó con éxito formidable el “Piporro”? Y así como éste tenemos muchísimos ejemplos que demuestran que los límites del festival pueden ser infinitos y me atrevería a decir que tener, alguna vez, a grupos como los “Tigres del Norte”, sería algo apoteósico.

EN TODO CASO, como cada año y pese a cualquier circunstancia o situación especial de coyuntura, el Festival Cultural 2013 se desarrolla en el mejor de los ánimos, sin contratiempos y con gran despliegue de talentos que caracteriza a esta celebración.

YA TRANSCURRIDO el segundo domingo, que yo etiquetaría como “estelar”, podemos hacer un primer balance que, siendo honestos, es positivo para bien de nuestra querida tierra que merece ser observada, por la publicidad inherente a los propios grupos artísticos, como lo que es, un magnífico polo turístico/cultural.

LOS VISITANTES, están constatando personalmente que nuestra incursión en listas negras de entidades con márgenes de inseguridad, contrastan con la tan evidente tranquilidad y el buen ambiente en que sigue desarrollándose la cada vez más arraigada tradición de Zacatecas: Su festival de semana mayor.

EN FIN, que La Sonora Santanera, la agrupación más importante de la música tropical mexicana, pisó el gran escenario y como era de esperarse, sus integrantes pusieron a bailar a los asistentes a la Plaza de Armas, al ritmo del danzón, mambo, bolero, rumba, chachachá, guaracha y cumbia.

¡Y CÓMO NO! ¿Quién podría resistirse a la tentación de bailar con semejante agrupación musical?

ACERTADA la expresión del comunicado oficial: La sonora “vistió de fiesta el máximo recinto cultural” con melodías que hace todos los años forman parte de la memoria colectiva de México y por supuesto de Zacatecas, donde también hay ritmo, emoción y alegría contagiosa.

SI NO, veamos a otra emblemática y no menos entrañable orquesta, la de provincia de Beto Díaz que, como la Sonora Santanera recibió de manos del gobernador Miguel Alonso, la estatuilla Minero de Plata por su participación en la apertura del concierto de La Internacional Sonora Santanera.

NOCHE más que completa, exitosa y de lujo la del domingo. Sigamos disfrutando del festival.