Estaremos en la mesa diálogo el próximo jueves seis a las 10:00 horas en la Secretaría de Gobernación (Segob), pero no aceptaremos la condicionante de levantarnos, porque si en este tiempo Peñasquito ha incumplido, si nos levantamos le darán más largas al conflicto.
Así lo estableció Arturo Martínez García, a nombre de los ejidatarios de Mazapil en conferencia de prensa, e informó que durante la semana acudieron a la Ciudad de México, al Senado, a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), y a la misma Segob, para acordar la mesa de diálogo.
Sin embargo que en el lugar del bloqueo continúa una campaña de desprestigio y de ataques al movimiento, que no coadyuva a que las partes encuentren de una forma cordial de solucionar.
“Nos denigran como siempre lo han hecho, nos humillan, nos llaman delincuentes, mafiosos, pero lo que no saben es que seguimos siendo los dueños de las tierras, pero nos vemos como extraños en nuestra tierra”, dijo.
Reiteró que los ejidatarios y transportistas quieren ser parte del trabajo y desarrollo de Mazapil, porque si no hay trabajo y las tierras ya están contaminadas por los jales a través del agua, y lo más grave, el abatimiento del manantial, entonces de nada sirve tener una mina ahí.
Complementó que una intervención empeoraría las cosas, aún y con la disposición de los ejidatarios de llegar a un buen arreglo conveniente para todos.
“No queremos las ‘perlas de la virgen’, pero sí parte de ése desarrollo porque la situación ya es difícil con la desaparición del agua prácticamente mataron a nuestro ejido de raíz, porque era la herencia de nuestros antepasados”, lamentó.
Desde el 2015 Peñasquito se desobligó de sus compromisos.
Por su parte Juan López, quien fue miembro del secretariado del Comisariado Ejidal en el período 2013-2015, relató que en enero de 2015 se reiteró la firma de 19 compromisos en la Ciudad de México, donde estuvo el gerente general de Peñasquito, Jesús Gutiérrez, como testigo, así como con Francisco Náñez, subsecretario de Gobernación.
Ahora en el 2019, dijo, igual cuando la minera llegó, ofreció muchas posibilidades a los 442 ejidatarios, de esos más del 50 por ciento ya son adultos mayores, y aceptaron la condición de que se diera trabajo a sus hijos, para eso crearon un Conalep, y se comprometieron a que quien obtuviera una carreta técnica inmediatamente sería contratado, pero sólo sucedió en la primera generación y desde entonces se incumplió.
Los 60 millones de pesos para los transportistas los quieren negociar, cuando ya es un trabajo realizado y avalado por Peñasquito
Jorge Vázquez, de la Unión de Transportistas Trabajadores y representante de CAVA, dijo que el asunto del trabajo devengado, en donde Peñasquito tiene un adeudo de 60 millones de pesos, la empresa Newmont-Goldcorp quiere negociarlo y trasladarlo a otros terrenos, pues desde octubre del 2018 a los camioneros ni un centavo se les ha pagado, y ello no está sujeto a negociación porque es un trabajo ya realizado, ya se facturó, ya se revisó y autorizó por ellos mismos, y estaba para pagarse de inmediato, pero lo detuvieron para usarlo como arma contra nosotros y condicionar una negociación. “Ellos piden una confianza que nunca nos han otorgado”, finalizó.