Considerado como una de las leyendas vivientes del rock nacional, el guitarrista tijuanense Javier Bátiz ofreció un espléndido concierto en la nave del antiguo templo de San Francisco, del Museo Rafael Coronel, que puso fin de manera exitosa a las actividades del Festival Internacional de Jazz y Blues (FIJyB) Zacatecas 2019.
Acompañado por su grupo de músicos y coro, Javier Bátiz subió al escenario para dar forma y vida a un concierto que se caracterizó por la inclusión de temas clásicos del rock mexicano que le han colocado como uno de los más reconocidos en su género.
Acompañado de la Tijuanera, su preciada guitarra, El Brujo se entregó al público zacatecano, quien respondió de la misma manera al ver la maestría con la que interpretó melodías como La montaña, Si estuviera aquí y Sonámbulo.
El músico, cuyos inicios se remontan a 1957, compartió la sensual sonoridad de sus acordes que envolvieron a los asistentes que por momentos aguardaron expectantes ante el talento del rockero, quien es contemporáneo de figuras como Carlos Santana.
Antes de su presentación, hizo su aparición en el escenario Bajo Protesta, grupo integrado por talento local que después de 18 años volvió a reencontrarse con el público, durante última noche de conciertos del Festival dedicado al jazz y blues en la entidad.
Conformado por Iván Leaños, en el bajo, Luis Díaz en la guitarra e Israel Leaños en la batería, deleitaron a los espectadores con un repertorio que integró melodías de grandes exponentes del Blues, así como de su material discográfico Dejaría de Ser Humano.
Los músicos de esta agrupación fueron ovacionados por el público congregado en este recinto cultural, que fue testigo de la exitosa culminación de uno de los festivales más gustados y esperados en Zacatecas.