Las cifras de violencia escolar, o bullying, van en aumento y son alarmantes, y México no cuenta con una legislación de ese nivel para prevenir y erradicar un problema de estas dimensiones, ante eso, el Senador de la República, David Monreal Ávila presentó una iniciativa para prevenir, erradicar la violencia y promover el desarrollo integral en el entorno escolar.
La iniciativa busca erradicar la problemática de violencia que se vive en las Instituciones Escolares de educación básica y media superior en México, así como emprender acciones para garantizar el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes, y privilegiar los derechos de los más desprotegidos.
Se sumaron las Senadoras: Mariana Gómez Del Campo, Martha Palafox, Martha Helena García, Silvia Guadalupe Garza Galván, y los Senadores: Mario Delgado, Miguel Romo Medina y Francisco Salvador López Brito.
El Estado mexicano en el año 2011 ratificó su compromiso con la defensa de los Derechos Humanos, mediante la reforma constitucional en esta materia, elevando al máximo rango estas normas que protegen la dignidad humana.
Sin embargo, la realidad dista mucho de cumplir con estos objetivos, la vida cotidiana de las niñas, niños y adolescentes se nutre de una sociedad llena violencia, de desigualdades, injusticias e inseguridad, formándolos en un ambiente que impide su sano crecimiento y desarrollo personal, y no garantiza el respeto a sus Derechos Humanos.
México, dijo, en el tema de violencia escolar, ocupa el primer lugar a nivel internacional, tan sólo en educación básica con 18 millones 781 mil 875 casos en primaria y secundaria, tanto en instituciones públicas como privadas, de acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.
Los resultados de este estudio arrojan que en el país, 40.24 por ciento de estudiantes han sufrido acoso; 25.35 por ciento han recibido insultos y amenazas; 17 por ciento en alguna ocasión habían sido golpeados, y el 44 por ciento en alguna ocasión fueron víctimas de violencia verbal, psicológica a través de las redes sociales.
La problemática que en su origen tiene diversos apéndices como lo es el ámbito familiar, los grupo de amigos, la influencia de los medios de comunicación, y la misma escuela, debe ser atendida desde diferentes ángulos, ya que encargar únicamente a la escuela de erradicar esta problemática, sería insuficiente.
Después de dos años de su gestión el Ejecutivo Federal presentó una Iniciativa Preferente con el objeto de regular la violencia en el entorno escolar, sin embargo, la propuesta no busca atender el problema de fondo.
Se puede dudar, que en sólo un capitulo con seis artículos el Gobierno Federal se busquen prevenir y erradicar la violencia en el Entorno Escolar.
La violencia escolar requiere una legislación que diga cómo erradicar y prevenir el problema, no lo que se debe hacer, y sobre todo que dote de herramientas a los docentes que día a día tienen que enfrentarse a este tipo de problemas.
Dejar tanta ambigüedad en la ley, sólo servirá para que ninguna autoridad se responsabilice, mientras el problema seguirá ahí.
Por todas estas razones, se presenta ante el pleno de esta Cámara de Senadores, esta iniciativa por la que se expide la Ley General para Prevenir, Erradicar la Violencia y Promover el Desarrollo Integral en el Entorno Escolar, que busca erradicar la problemática de violencia que se vive en las Instituciones Escolares de educación básica y media superior en México, así como emprender acciones para garantizar el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes, y privilegiar los derechos de los más desprotegidos.
Monreal Ávila precisó que esta iniciativa crea el Sistema Nacional de Prevención y Erradicación de la Violencia Escolar, que busca coordinar acciones entre las Secretarías de Educación Pública, Salud, Gobernación, Desarrollo Social, así como las Secretarías de educación de las entidades federativas, y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, encaminadas a prevenir y erradicar la violencia en el entorno escolar. El objetivo es dar un tratamiento integral a este problema, a partir de estrategias coordinadas y de corresponsabilidad.
Esta ley pretende establecer una corresponsabilidad, de los padres de familia y tutores como actores fundamentales para erradicar la violencia en el entorno escolar, a través de señalar las obligaciones que les corresponden en cuanto al cuidado, atención y seguimiento del desempeño académico y de conducta de los estudiantes.