SERGIO BUSTAMANTE.

Concluyó un año; un ciclo o sol, concluye también éste recuento. Después de hacer una revisión a las tendencias del cine durante el 2012, los estrenos más relevantes y detenernos a pasar revista en nuestra industria, llegamos a la tercera y última parte de esta entrega.

La lista presentada a continuación va sobre lo que un servidor considera fue lo mejor que pudimos ver en las salas de cine durante este año. Más allá de cumplir con ciertas características o ser simplemente buenos filmes, se seleccionaron las películas que a consideración personal lo tienen todo. Al decir “todo” es hablar de un conjunto de parámetros que hacen a un filme funcionar después de la sala, provocar una sensación y recuerdo duradero, a veces por días. Dejar huella.

Sin más preámbulo y sin ningún orden o jerarquía en particular mas que el numérico, he aquí mi top 12 de las mejores películas del 2012.

1. Le Havre. (El Puerto de la Esperanza)

A pesar de ser un filme del año 2011, esta joya franco-finlandesa llegó (limitadamente) a nuestra cartelera en marzo de este año.
Una lástima que haya pasado desapercibida. La historia sobre un pequeño inmigrante africano protegido por un anciano boleador de zapatos es una clase magistral de lenguaje cinematográfico. Planos, simbolismo y diálogos cual si se tratara de una gran novela. Es, en pocas palabras, una apología de lo visual y un recuerdo de que las mejores películas no necesitan de tanta tecnología, sino de imaginación y corazón.

2. Jagten. (La Caza)

Nadie duda del talento de Thomas Vinterberg como un cineasta completo, pero definitivamente lo suyo es devastar al público psicológicamente.
Este año lo hizo (como no lo hacía desde Festen) con La Caza, un filme sobre las consecuencias de la mala comunicación; la supuesta inocencia de los niños y la absoluta verdad de los adultos. Lo fácil que resulta juzgar y vivir de la mentira.
La Caza es un filme con muchas lecturas, sobriamente filmado, y tal como su título, va avanzando pausadamente cual cazador y llega hasta el fondo, buscando inocencia donde no existe, donde nadie lo es.
El filme funciona por diversos elementos, pero si hemos de escoger uno tendría que ser Mads Mikkelsen, su protagonista. Él es el drama en carne y hueso, su conmovedora y extraordinaria actuación justifica el premio en Cannes y los que estén por venir.

3. Shame. (Deseos Culpables)

Otro de esos filmes del 2011 que llegó algo tarde a nuestro país; otro de esos filmes que duraron poco en cartelera; otro de esos filmes que es una joya sin mucha atención.
Shame comparte con La Caza dos cosas: Una devastadora narración y la sobresaliente actuación del protagonista.
Shame narra la rutina deshumanizada a la que hemos entrado, una vida carente de emociones y equilibrio donde los vicios, en este caso el sexo, llenan un vacío que no podemos explicar, que es casi imposible de combatir y que pareciera no tenemos intención de hacerlo. Para esto, Steve McQueen vuelve a hacer dupla con el gran Michael Fassbender; sí, el Magneto de X-Men: Primera Generación, quien aquí da vida a Brandon, el eje y lienzo de todas las emociones que McQueen quiere transmitir.

En el 2012 tuvimos la oportunidad de ver a Fassbender tres veces en el cine y con diversos personajes (Dr. Jung en Un Método Peligroso y David en Prometheus) y no podemos mas que concluir que es, sin duda, el mejor actor que existe en este momento.

4. Prometheus. (Prometeo)

Ya que ha sido mencionada, que entre de una vez a la lista. Sí, Prometeo es de lo mejor que se vio en el año.
Como ya se ha dicho hasta el cansancio, Prometeo tiene lagunas o fallas si nos ponemos muy exigentes. El hecho de la relación con Alien y Ridley Scott le pone un parámetro demasiado alto, pero de lo que se ha dicho muy poco es que Prometeo no buscaba responder preguntas ni atar cabos, sino contar algo diferente.
Más aun, Prometeo eleva su premisa a niveles filosóficos; el origen de la vida, el sexo y el temor a dios como la verdadera cuestión, y lo hace con gran maestría. Si a eso le añadimos que aparte es un viaje sonoro y visual apabullante, vale entonces decir que un Prometeo es de lo mejor del 2012.

5. The Perks of Being a Wallflower. (Las Ventajas de ser Invisible)

¿Qué está mal en este filme? Nada. Absolutamente todo funciona, todo encaja y lo hace de maravilla.
Lo que hace a Las Ventajas de ser Invisible una de las mejores películas de este 2012, es su potencial de magnificar y narrar maravillosamente una historia tan común como la lucha de un adolescente promedio por pertenecer.
Como si eso no fuera poco, el debutante Stephen Chbosky echa mano de un gran soundtrack (¿Hay algo más emocional que los recuerdos ligados a la música?), y muy buen reparto.
El resultado es satisfactorio, conmueve y alimenta el espíritu. Un filme que tarde o temprano se convertirá en un clásico de culto.

6. The Dark Knight Rises. (Batman: El Caballero de la Noche asciende)

¿Discurso capitalista? ¿Un villano socialista? ¿Un nuevo héroe? ¿Un final polémico? Todo eso y más se ha dicho de The Dark Knight Rises. Todo, y a pesar de eso funciona muy bien. En este espacio ya dimos las razones de porqué TDKR es un gran filme.
Vale la pena repetir que las libertades que Christopher Nolan se dio están permitidas y no hacen de su conclusión algo tan menor como lo que se cree, al contrario, The Dark Knight Rises se apegó más al inherente de este tipo de filmes y aun así, otros de su categoría como The Avengers y The Amazing Spider-Man lo ven de lejos, desde muy muy lejos.

7. Amour (Amor)

Michael Haneke lo hizo de nuevo. Pareciera que cada película suya está destinada a ser parte de lo mejor del año en cuestión. Creemos que no es premeditado, pero el talento como el dinero; es imposible de esconder. La capacidad que tiene éste cineasta para retratar la condición humana no tiene comparación.

Amor comienza como un filme sobre el amor de una pareja, pero termina siendo un filme sobre el amor a la vida. La lucidez que puede alcanzar un humano en la dicha y en la enfermedad, hasta donde nos impulsa el espíritu de supervivencia y de amor por los demás, hasta donde somos capaces de llegar, de hacer, de sentir, de no perdernos en el vacío.
Laberintos del alma que solo una mano maestra como de la Haneke es capaz de filmar. Sin la necesidad de hacerlo gráfico, sin hablarlo, solamente cine.

8. Argo. (Argo)

Si hubo un filme capaz de provocar la misma emoción que The Dark Kngiht Rises en términos de ritmo y de tener al espectador al filo, fue éste. Incluso, dada su trama “basada en hechos reales” podríamos decir que hasta más.

Con Argo, Ben Affleck hizo un dictamen que supera a su filme. Una declaración de talento y de clase; es un mejor director que actor. Sabe contar, domina cada aspecto de la dirección y se da lujos: Se pone como protagonista, se vanagloria, brinda un performance competente y con todo ese exceso entrega uno de los mejores filmes del 2012. Si les suena conocido es porque solamente genios como Woody Allen o Clint Eastwood salen bien librados de esa fórmula. Affleck lo hizo, y ya no podemos mas que esperar con ansia su siguiente proyecto.

9. The Cabin in the Woods (La Cabaña en el Bosque)

Era Cita de Sangre o esta. Dos películas que hacen honor al género, y las dos igualmente sorprendentes, pero la razón por la que gana La Cabaña en el Bosque es una: Su aportación.

La Cabaña en el Bosque no es solamente un homenaje a todas esas creaciones que nos atormentaron en la niñez, es también una de las historias más originales que se han escrito en los últimos años, no solo de horror, sino a nivel guión.
Mientras la gran mayoría de directores se empecinan en repetir la fórmula una y otra vez con —ocasionalmente— un cambio que en realidad no lo es, La Cabaña en el Bosque se burla de ese esquema y a partir de esa parodia desarrolla una trama que cuando se piensa no puede ser más original, da un giro torcidamente brillante.
Un filme como muy pocas veces se ha visto en el cine de este género, de esos que marcan tendencia y que en unos años también podremos llamar clásico.

10. Hugo. (La Invención de Hugo Cabret)

Para hablar de Hugo se necesita mucho espacio. Ya hablamos sobre las razones de su grandeza aquí. Pero vale la pena recordar algunas.
Hugo es uno de los mejores trabajos de Martin Scorsese, un director que ha hecho obras maestras como Goodfellas (1990) Raging Bull (1987) y Taxi Driver (1976).
Hugo es un soberbio homenaje al cine. A su magia, su historia, toda su fantasía y uno de sus artífices: Georges Méliès.
Hugo es la mejor película que se ha hecho en tercera dimensión y punto. No hay, hasta el día de hoy, ninguna que la supere o se le compare.

Esas razones son suficientes para saber que Hugo pertenece, sin dudas y objeciones, a lo mejor del 2012.

11. Moonrise Kingdom. (Un Reino bajo la Luna)

Una película promedio de Wes Anderson es demasiado buena a comparación de muchas otras. En el caso de Moonrise Kingdom no supera a su obra maestra The Royal Tenenbaums (2001) claro, pero se le acerca y mucho.

Lo mejor y su principal virtud es que Moonrise Kingdom tomó, en apariencia, un camino diferente. La marca de Anderson está presente, travellings y planos über estéticos, la paleta de colores, la música como eje y esos personajes que tanto amamos, tan cercanos e impenetrables, solo que en esta ocasión son dos niños casi adolescentes protagonizando una historia que se cuenta en segundo plano con dos personajes adultos. Es decir, la misma trama en dos niveles. Una historia colmada de metáforas tan cuidadas que siguen asaltándonos hasta en los sueños.
El tipo de película que envuelve tanto y tan sutilmente que cuesta salir del personaje, abandonar la complicidad que su director con tanta maestría crea

12. Holy Motors. (Holy Motors)

Tratar de explicar Holy Motors como filme es complicado. Es como pedirle a una persona que defina el amor.
Holy Motors va más allá de ser un filme, es un retrato de la vida. Una pieza visual que refleja nuestro desarrollo como sociedad, de como actuamos, de los roles que desempeñamos (aun de forma involuntaria) como hombres, como mujeres, como héroes y como villanos: Como humanos.
¿Estamos conscientes? ¿Sentimos? ¿Razonamos? ¿Qué nos mueve? ¿Es el corazón el órgano de una maquina viva pero sin alma, o viceversa?. Tal vez sólo somos obreros de ésta fábrica llamada mundo.

Repetimos, Holy Motors es difícil de explicar, reseñarla es incluso quitarle un poco de misticismo. Pero si podemos afirmar que es una experiencia cinematográfica única, que nos voló la cabeza de principio a fin.

Menciones especiales:

We Need to talk about Kevin. (Necesitamos hablar de Kevin)
Un filme brutal, casi perfecto, y que como mencionamos en este texto; fue una grave omisión en la pasada entrega de los Oscares, al menos en lo que se refiere a protagónico femenino con Tilda Swinton y en el rubro fotografía.

Skyfall. (Operación Skyfall)
Solamente una cosa: Estar entre una de las tres mejores películas de una saga cinematográfica que lleva 23 ediciones desde los años sesenta es un logro trascendente, mucho más si consideramos la época.

Marley. (Marley)
En un año que se caracterizó por tener una buena cuota de documentales, tanto nacionales como extranjeros, Marley sobresale en todos los sentidos.
Uno de los mejores y más completos documentales que se han hecho sobre una estrella musical o grupo, en este caso: Bob Marley.

Desde este espacio un abrazo afectuoso y sincero a todos los lectores de DireccionesZac.
Que tengan un fantástico 2013 y sus deseos se vuelvan una realidad.