En el Gobierno de Miguel Alonso Reyes no habrá programas de combate a la marginación y pobreza con fines electorales y políticos.
En lo hechos, se busca reducir la muy alta y alta marginación en la que viven 150 mil zacatecanos, que habitan 1 mil 200 comunidades a lo largo de la geografía estatal. «Una vida digna para ellos, es la gran meta».
En reunión interna con los integrantes de su gabinete de desarrollo social, el Gobernador del Estado hizo una completa evaluación de los programas de combate a la pobreza que están siendo aplicados aquí.
Se hizo un puntual balance de los avances que tienen dichas acciones y la oportuna y necesaria coordinación que la administración estatal lleva a cabo con los municipios.
«La prioridad es reducir los malos indicadores de pobreza y marginación que tiene la entidad», dijo el Gobernador a los funcionarios.
Revisó los avances de cada programa y las acciones alcanzadas hasta ahora, además de los planes y metas para el presente año.
Se trata de acciones en materia de agua potable, electrificación de viviendas y poblados.
Al mismo tiempo, de programas de alfabetización, abatimiento a niveles bajos de infraestructura educativa y pobreza alimentaria.
Una acción que constituye una meta sexenal, consiste en lograr que no haya una sola habitación con pisos de tierra.