Luego de señalar que el sueño americano se convierte en una pesadilla al momento en que se busca emigar al vecino país, la analista del fenómeno migratorio, Giselle Arellano Ávila, aseguró que el flujo de emigrantes, hoy en día va en aumento; sin importar los riesgos que implica el buscar llegar a Estados Unidos.
En este sentido, Giselle Arellano Ávila lamentó que se haya roto esa costumbre que seguían las familias mexicanas de que sería el papá, el hermano, el tío o el primo, los que se irían a buscar oportunidades laborales mientras que las esposas, madres, hermanas o hijas eran quien se quedaban en espera de que el trabajo de su familiar, le diera un mejor nivel de vida.
Pero ahora, -aseguró Giselle Arellano- familias completas abandonan sus localidades en busca de mejores oportunidades de trabajo, sin importar que en el largo trayecto; sufran no sólo la falta de agua y comida sino que se enfrenten a peligros como violaciones, robos, secuestros e incluso la muerte.
Por ello, afirmó que quienes aprovecha muy bien los flujos migratorios son las organizaciones delictivas ya que, es allí donde buscan a sus víctimas, las que muchas veces son asesinadas por el tráfico de Órganos, la Trata de blancas o bien para convertirlos en esclavos modernos que terminan muriendo por la falta de alimentación adecuada y por el agotamiento de las largas jornadas laborales a las que son sometidos.
De manera que, Arellano Ávila ante tanta violencia hacia los migrantes, los exhorta a buscar las oportunidades de trabajo en el vecino país con un ingreso legal, acudiendo a Relaciones Exteriores donde expedirán el pasaporte que le permitirá tramitar la visa de trabajo o de turista y entonces poder ingresar a Estados Unidos de América, donde podrá buscar un empleo que le permita ayudar a la familia que ya no dejó, si no la lleva consigo.