“La generación actual de estudiantes ya interactúa con el Sistema de Justicia Penal el cual tiene nuevas estrategias de comunicación dejando de lado el sistema escrito”, indicó el Magistrado Carlos Villegas Márquez, ntegrante de la Segunda Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas (TSJEZ), ante alumnos de la Unidad Académica de Derecho de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ).

En la conferencia “Estrategias de Comunicación en el Sistema de Justicia Penal”, destacó como premisa principal, el ser auténticos, y no tratar de copiar íntegramente a alguien, ya que para que un mensaje llegue (hablando del rol del abogado en audiencia) debe de partirse de la autenticidad, pues cuando se aparenta lo que no se es, se percibe inmediatamente y es cuando se genera un conflicto interno en el emisor del mensaje, por ello convocó a los estudiantes a buscar su mejor valor, su mayor habilidad que puedan explotar en benefició de su profesión siendo conscientes de sus debilidades.

“Cuando mandamos un mensaje en esencia queremos informar y persuadir en la labor como abogados sin distingo del rol que tengamos, juez, defensor, fiscal, necesitamos persuadir a quien  va dirigido el mensaje”, refirió.

Villegas Márquez dijo que los factores que inciden en una buena comunicación son el lenguaje corporal, tono de voz y, por supuesto, las palabras (el contenido del mensaje).

 “Venimos de un sistema donde la clave era lo que se decía por escrito incluso existe un dicho muy utilizado “papelito habla”, pero en el sistema de justicia penal oral, cuando estamos en comunicación un factor relevante en este mensaje es el lenguaje corporal”, resaltó.

El 55 por ciento del significado de cualquier mensaje proviene del lenguaje corporal visual (gestos, postura y expresión facial), el 38 por ciento del significado deriva del elemento no verbal del discurso (vocal); es decir, el modo en que se dicen las palabras, tono, velocidad e inflexión; mientras que el 7 por ciento del significado proviene de las palabras en concreto (contenido), por lo tanto, el 93 por ciento de nuestro mensaje es transmitido por el lenguaje corporal, explicó.

El Magistrado de la Segunda Sala Penal señaló que, de acuerdo a estudios, puede existir incoherencia entre lo que expresamos y lo que se dice, pero si se expresa de una manera segura, la gente tiende a creer, aunque en la sustancia, en el tema de fondo no sea del todo coherente.

“En términos generales la gente tiende a olvidar la mayor parte de lo que les decimos, pero jamás se van a olvidar de cómo lo expresamos, de la actitud que asumimos, el lenguaje corporal nos permite ver más allá de las propias palabras, nos permite ver el lenguaje mudo, aquello que no se dice, podemos ver el fondo o intención del emisor”, afirmó.

Recomendó a los alumnos que al momento de acudir a una audiencia es importante que ellos y las personas a quienes asisten profesionalmente, incluso los testigos tomen en cuenta factores como: el lenguaje legal, saber cuál es el protocolo en sala, lo que se espera de cada uno de ellos en la audiencia,  cuánto tiempo  demorarán su intervención en la misma, cuándo saber hablar, cómo orientarse dentro del edificio y con ello evitar que factores diversos puedan influir en  que el mensaje llegue a su destinatario.

Resaltó que estar en una sala de audiencias es una experiencia intimidante, atemorizante, no familiarizada y esto provoca que el mensaje algunas veces no llegue debido a que la gente está asustada, angustiada y cuando las personas están en esa situación, simplemente no escuchan, no sabe de lo que está pasando en audiencia y ello impide que el mensaje llegue claro; “que su principal aliado para que el mensaje llegue debe de ser el conocimiento de la ley”.

“La Sala de Audiencias es un escenario en donde cada interviniente emite un mensaje que debe de ser claro, con una articulación adecuada, en un lenguaje sencillo que permita persuadir”, expuso.

Para que el mensaje llegue es importante el tono de voz ya que éste genera empatía, respeto, control, autoridad y autenticidad, señalando que “nuestro lenguaje tiene que ser familiar, accesible para que todos los que se encuentren en audiencia entiendan de lo que estamos hablando, pues la lógica es una de las premisas básicas de valoración de la prueba por parte del juzgador”.

Otro punto a resaltar, señaló el Magistrado es que al momento de acudir a una audiencia se debe tener claro el rol que nos corresponde a cada una de las partes, y ante ello debemos ser auténticos y congruentes: en la sala de audiencias como en la vida misma.

Mencionó que otro factor que incide en el mensaje es la vestimenta que debe de ser acorde a la gran responsabilidad y función que se desempeña.

“No corra de una audiencia, termínela adecuadamente, hay que culminar la tarea, nos podemos equivocar, pero esto no debe obstaculizar su desempeño”, concluyó.

La conferencia forma parte del Convenio Marco entre la Unidad Académica de Derecho de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), y el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Zacatecas (TSJEZ).