CIUDAD DE MÉXICO.- El incumplimiento del estado de Aguascalientes con los pagos puntuales de un contrato de tipo arrendamiento financiero y otro semejante del estado de Zacatecas el año pasado, dejan ver la debilidad de las prácticas de gobierno y riesgos políticos que afectan a algunas entidades federativas, señaló Moody’s Investors.
El 16 de febrero, Banco Interacciones, un banco comercial mexicano, confirmó que el estado de Aguascalientes (no calificado por Moody’s) incumplió con los pagos puntuales de un contrato de tipo arrendamiento financiero.
La decisión de Aguascalientes parece haber estado impulsada por falta de voluntad para cumplir con sus obligaciones contractuales, más que por una situación de estrés financiero y su incumplimiento de pago es un factor crediticio negativo para los estados mexicanos.
Este incumplimiento y otro similar por parte del estado de Zacatecas, en el tercer trimestre del año pasado, ponen de manifiesto la fragilidad de las prácticas de gobierno interno y riesgos de eventos políticos que afectan a un limitado número de estados mexicanos, asegura.
Para la calificadora, aunque no se ve que este evento ocasione incumplimientos generalizados en el sector, tampoco se espera que sea la última vez que ocurran situaciones de este tipo en el sector subsoberano en México.
«Aunque estos eventos no constituyen un fenómeno generalizado, dado el elevado grado de antagonismo que existe actualmente entre los principales partidos políticos de México, así como a elecciones en 10 estados en el 2011 y el 2012, es probable que estos sucesos se repitan en los próximos dos años», prevé.
Después del incumplimiento de pago de esta obligación de tipo arrendamiento por parte de la administración saliente, el gobierno recientemente electo de Aguascalientes, que tiene una afiliación política distinta a la administración anterior, se rehusó a respetar los términos de esta obligación contractual, a pesar de haber recibido una orden judicial que le requiere a hacerlo.
Las circunstancias de este incumplimiento de pago son similares al incumplimiento selectivo en el que incurrió el Estado de Zacatecas con respecto a una línea de crédito de corto plazo en septiembre del 2010, que también ocurrió durante un cambio de administración estatal de un partido político a otro.
Considerando que ninguno de estos estados se encontraba pasando por severas presiones financieras cuando ocurrieron los incumplimientos, estos casos ilustran la severidad de los riesgos de circunstancias políticas para los estados mexicanos con débiles prácticas de administración. (Tomado de EL MAÑANA)