El gobernador Alejandro Tello presentó a la soberanía popular, el pasado ocho de septiembre, el primer balance de su administración, que bien puede ser calificado, en rigurosos términos de ciencia política, más allá de cifras y datos duros, como el informe de la legitimidad y la legitimación.
Para argumentar esa tesis del informe de la legitimidad, se pueden mencionar al menos cinco factores, auspiciados por Alejandro Tello: 1).-La recuperación del diálogo entre poderes, en particular al asistir a escuchar el posicionamiento crítico de los diputados locales; 2).-La presencia de la mayoría de los ex/gobernadores; 3).-El aval de la iniciativa privada; 4).-El acompañamiento de los diferentes Partidos; y 5).-El reconocimiento expreso del clero político.
En la vía del proceso para fortalecer la legitimidad, el gobernador reivindicó el diálogo con los integrantes del Poder Legislativo, el ente público responsable por cierto de garantizar la vigilancia de los actos de gobierno y el uso honesto y eficiente de los recursos.
El mandatario escuchó las posiciones parlamentarias críticas de los diputados y al final, más allá de rupturas, en un clima de tolerancia, se estableció el reconocimiento mutuo del papel y la función de cada quien, en la conducción del desarrollo de Zacatecas.
A este primer informe, también, en un hecho inusitado, que no sucedía desde hace varios años, asistieron cinco ex/gobernadores, lo que se tradujo en un abierto respaldo al titular de la administración estatal. Pasaron lista de asistencia en el evento del “Multiforo”, Genaro Borrego, Amalia García, Miguel Alonso, Arturo Romo Gutiérrez y Pedro de León Sánchez. La iniciativa privada y el sector social también estuvieron presentes.
La legitimidad y legitimación es fundamental, para que un gobierno pueda ofrecer y rendir buenas cuentas a la sociedad. Son elementos esenciales, además, para garantizar la gobernabilidad democrática y la gobernanza.
¿Qué es la legitimidad y la legitimación?
La legitimidad es un concepto del derecho, la filosofía y la ciencia política que se traduce como el merecimiento al reconocimiento de la autoridad vigente, como bien lo establece el pensador alemán, Hürgen Habermas, en sus memorables obras sobre racionalidad comunicativa.
En otras palabras, la legitimidad significa la pretensión que acompaña a un orden jurídico de ser reconocido como correcto y justo, que no está desprovisto de buenos argumentos.
Para otros autores (como Max Weber), la legitimidad simple y sencillamente se define como la práctica de la autoridad para ejercer la dominación política en una sociedad.
La legitimación, en cambio, es el reconocimiento al trabajo de un gobierno por su acción estratégica al servicio de la población.
¿Acuerdo, Consensos y Gobernadores?
El acuerdo y el consenso construido con los ex/gobernadores, representa incuestionablemente un punto relevante para garantizar el principio de gobernabilidad democrática de nuestro Estado.
En una primera lectura de los acontecimientos políticos estatales, se observa la buena disposición de los ex/mandatarios por establecer acuerdos y una fluida comunicación con el gobernador Alejandro Tello. Eso es de por sí, una ventaja que debe aprovecharse para apuntalar la gobernabilidad de Zacatecas.
En general todos los ex/gobernadores, por su trayectoria, cuentan con una capacidad de aportar ricos elementos de interlocución local y nacional en favor del Estado. Entonces, porque apostarle al pleito, a la disputa y a la confrontación, cuando existe disponibilidad al entendimiento y al diálogo.
La legalidad y legitimación
Por todos estos ingredientes, Alejandro Tello presentó, ni duda cabe, el informe de la legitimidad y legitimación.
Un hecho que puede ser útil para insistir en la construcción de un horizonte de desarrollo para Zacatecas, que nos aparte de los rezagos y la marginalidad.