La gestión de recursos ante diversas instancias del gobierno Federal y estatal son palpables y continúan vigentes, aseguró el presidente municipal de Zacatecas, Carlos Peña Badillo.

Dijo que la Administración llegó a resolver problemas, no a encontrar pretextos, ni culpar a los que hicieron o no las cosas.

En comparecencia ante diputados de la LXI Legislatura, explicó que su función y política no es de retrovisores, es de parabrisas para ver hacia adelante, y resolver la problemática; y aseguró que en eso está concentrado y esos resultados son los que habré de dar a la ciudadanía.

El presidente municipal fue citado a informar a detalle de la aplicación de 150 millones de pesos, obtenidos de un empréstito autorizado por el Poder Legislativo.

Carlos Peña se refirió a tres proyectos, primero el Complejo Administrativo Ayuntamiento; segundo, la nueva Comandancia de Policía y, tercero, el distribuidor vial Quebradilla, en conjunto con el gobierno estatal, y agregó que buscan ser muy responsables en la aplicación del dinero.

Se busca “oxigenar” las finanzas, buscar una estrategia para resolver y responder a la población que nos dio la confianza y también para quien no confió, para demostrarles que “éramos una opción para trabajar de la mejor manera, por y para los zacatecanos.

Interrogado respecto de si hizo “obras de relumbrón”, Carlos Peña aseguró que no tienen obras así, sólo atención de necesidades.

Respecto de la posibilidad de tener constructoras con mayor beneficio en la asignación de proyectos, Peña aclaró que “de las constructoras, ni favoritas ni consentidas. Nosotros hemos distribuido la obra pública del Municipio de Zacatecas entre todas las constructoras vía concursos y licitaciones”.

Y cuando se trata de asignaciones, es porque las mismas empresas se acercan y expresan su deseo de participar, y son constructoras que generan empleos para la gente del Municipio y originarias de la capital.

Al inicio de la administración, informó, se tuvo una deuda por 111 millones 939 mil 340 pesos, más otros como laudos por 14 millones de pesos, y otros no registrados al IMSS por 19 millones 144 mil 939 pesos.

El adeudo al IMSS es de 10 millones de pesos, y no se ha pagado porque los directivos suspendieron un convenio, pero el Municipio está dispuesto para aplicar el dinero cuando la institución ofrezca condiciones financieras.

De la capacidad de gestión que ha tenido ante las diversas instancias, de 12 millones de pesos del empréstito para programas convenidos, se logró multiplicarlos a 31 millones de pesos.

“No estamos atados, somos mayores de edad, somos Alcaldes, y la muestra son los 100 millones de pesos que se acaban de aprobar para diversos proyectos, las obras y programas ahí están; en caso de un servidor la gestión no falta, eso habla del respaldo del Gobierno de la República, y del Estado, y la capacidad de gestión que ha tenido mi Administración”.

Habló también de lo sano en el manejo del crecimiento de la nómina, y de un mil 599 empleados recibido, ahora son un mil 565; la estrategia empleada fue que 280 trabajadores de confianza firmaran contratos temporales, que al término del trienio se irán con él.

Destacó que probablemente el manejo del adeudo administrativo al cierre, en 2016, se mantenga similar, pero la gran diferencia será que “le daremos viabilidad financiera a la Administración; cuando llegamos era una bola de nieve, con muchos adeudos”.

Hoy, estableció, se puede hablar de una deuda planeada y responsable, para quien venga detrás no reciba adeudos por aquí y por allá, sino con una planeación.

Por su parte los diputados coincidieron en que el informe presentado fue a satisfacción, igual que es satisfactoria esta práctica de que los Alcaldes acudan, de una manera cordial a rendir cuentas que hablan de transparencia con la que se manejan los recursos públicos.