La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), otorgó la capacitación “Los Derechos Humanos de los Pueblos Indìgenas”, con la ponencia del Lic. Julio César Rodríguez Cortez, integrante de la Cuarta Visitaduría de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), impartida a grupos indígenas, servidores públicos de diversas instancias de gobierno, así como a trabajadores de este organismo estatal.
En el acto inaugural, el Lic. Catarino Martínez Díaz, Secretario Ejecutivo de la CEDH, aseveró que los funcionarios tienen la obligación de atender a cada persona en su lengua, cuando no es posible, se sugiere un intérprete.
Enfatizó que en el estado de Zacatecas, la CEDH tiene previsto el diálogo con todos los grupos indígenas que hay en la entidad (otomíes, coras y huicholes).
Durante la capacitación, el Lic. Julio César Rodríguez Cortez mencionó que “no por el hecho de ser indígena se es vulnerable, sino el contexto es lo que lo sitúa en condición de fragilidad”, ya que muchas veces, ellos carecen de educación, de servicios básicos y de instituciones de salud.
En México, viven alrededor de 15.7 millones de indígenas, la gran mayoría están ubicados en estados del sur del país, sin embargo en la mayoría de los estados de la República Mexicana se tiene población indígena.
Asimismo, el integrante de la Cuarta Visitaduría de la CNDH señaló que a nivel nacional, hay 6 millones 695 mil 228 personas hablantes de lengua indígena y de éstos, 980 mil 994 personas en México, hablan una lengua indígena y no hablan español.
Refirió que después de la India, nuestro país es el que más abundancia de lenguas tiene, con 69 idiomas, incluyendo el español. Por lo que resaltó la necesidad de impulsar legislación a favor de los pueblos indígenas.
Por ello, la necesidad de que los servidores públicos conozcan los derechos de este grupo vulnerable y de tener escuelas bilingües que permitan que los idiomas de estos perduren.
Rodríguez Cortez, dijo que los gobiernos de los estados debieran incidir en dos aspectos: que se retome la enseñanza bilingüe, para que no se pierdan los lenguajes, y que se contemplen intérpretes que permitan abonar al desarrollo de los indígenas, así como a su integración en la sociedad.