Las tendencias a la derechización del poder mundial con la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos de Norteamérica, plantean <en un retorno cíclico negativo de la historia>la muerte del liberalismo económico y la vuelta al fascismo, en una etapa donde sale mal librado nuestro país y en particular las entidades federativas de cultura migrante como Zacatecas.
Esta época representa complejos problemas estructurales para la vida de la Nación, a los que no se les ven salidas inmediatas. Y el contexto de este desajuste sistémico se encuentra atado a la crisis de representación y legitimación de las elites políticas del país.
La falta de capacidad anticipatoria de los equipos y grupos gobernantes, ante la circunstancia de los bruscos movimientos especulativos de las finanzas mundiales, que hoy mantienen en vilo a la economía mexicana, es otra de las causales que han propiciado negros nubarrones y tormentas sobre el porvenir de la Nación.
A lo anterior se suma la carencia de creatividad para estimular y detonar los niveles de productividad, factor que es el indicador que nos describe sí la economía se encuentra en condiciones razonables de salud o no.
Desde hace por lo menos tres décadas la economía mexicana, por sus precarios e insuficientes niveles de crecimiento, se mantiene débil y enferma. Pero ahora, ha entrado a una etapa de terapia intensiva.
Por si fuera poco, el gasolinazo y el efecto domino en el incremento de los precios de los productos de la canasta básica, han creado un clima de profunda irritación social, nunca antes visto en la historia reciente del país.
Este escenario traumático de shock demanda la implementación de medidas efectivas para salir de la tormenta económica que agobia sobre todo a los sectores más vulnerables de la sociedad. ¿Quién será el temerario y eficaz piloto que ayude a estabilizar el rumbo del barco en un mar de aguas turbulentas?¿Acaso hay que esperar a que la coyuntura electoral del 2018 contribuya a determinar el nombre de un nuevo líder moral para la República?
¿EL RETORNO DEL FASCISMO?:
A inicios del siglo XX, el economista alemán Friederich List (1789 -1846) justificó en sus teorías el proteccionismo económico por razones de seguridad nacional y desarrolló los dos medios para garantizarlo: la fijación draconiana de impuestos y la imposición de tarifas aduanales a los productos y mercancías extranjeras y luego sentenció: “La competencia sólo es posible entre naciones fuertes”. Justificó más aún, la fuerza militar para garantizarlo y sostenerlo.
Años después, estas teorías proteccionistas de corte nacional/socialistas fueron adoptadas por el régimen alemán fascista de Adolfo Hitler y estuvieron apuntaladas con el uso de la bota militar del ejército.
El proteccionismo económico para las empresas y las industrias fascistas alemanas, se tradujo en un golpe de muerte para las concepciones del liberalismo económico. Hoy se repiten de manera circular los hechos de la historia.
DONALD TRUMP Y EL RETORNO DEL PROTECCIONISMO TOTALITARIO:
El próximo día 20 de este mes toma posesión de la presidencia de la Unión Americana, Donald Trump y esto representa no sólo la expresión señera del más exacerbado retorno del proteccionismo fascista, sino más aun, un cuchillazo en el corazón del liberalismo económico. A México esto le afectará sobre manera.
Tendremos en el 2017 una economía mexicana más vulnerable, que crecerá a menos del 2 por ciento de su producto interno bruto, porque las draconianas iniciativas proteccionistas norteamericanas frenarán las inversiones hacia nuestro país.
En México, para enfrentar esta crisis, necesitamos reconstruir los horizontes del porvenir de la Nación, con nuevos liderazgos éticos.