Las armas nucleares son las más peligrosas en la tierra, ya que la simple utilización de una se pueden destruir pueblos enteros y quitar la vida a miles de personas, de igual modo pone en riesgo el medio ambiente y a las futuras generaciones, a lo largo de la historia, sólo se ha hecho utilización de dichas armas dos veces: En Hiroshima y Nagasaki en 1945.
Aunque marcó a la humanidad entera, aún quedan en el mundo más de veintiséis mil armas nucleares, de las cuales los países potencia poseen la mayor cantidad de armas; desde 1946 las Naciones Unidas ha hecho un gran esfuerzo por reducir el armamento nuclear entre sus países miembros, es por eso que se han creado acuerdos internacionales y bilaterales que tratan de promover el desarme.
Lamentablemente los tratados y las Acciones de las Naciones Unidas no han sido suficientes para eliminar dicho problema. A consecuencia, el pasado 26 de septiembre el Canciller cubano Bruno Rodríguez lanzó un llamado de alerta en la 69° Asamblea General de las Naciones Unidas reunida para conmemorar el día internacional para la total eliminación de armas nucleares.
El Canciller alentó a todos los países miembros de dicha organización a hacer un esfuerzo por eliminar dicho armamento, ya que es la única manera de impedir que la especie humana sufra un poder destructivo, cabe destacar que Rodríguez afirma que la portación de estas armas viola el Derecho Internacional Humanitario, así mismo insistió en que las Naciones Unidas tome medidas para detener los programas de perfeccionamiento y desarrollo de nuevos tipos de armas nucleares, de igual modo, destacó que América Latina y el Caribe se considera una zona de paz que está comprometida con el desarme nuclear.
Por último aludió a la ONU por la próxima celebración de la Conferencia de Alto Nivel sobre Desarme Nuclear convocada para el 2018.
Jessica Muñoz Muro