Por Marco Antonio Flores Zavala
Felipe Arturo Ávila Espinosa es uno de los expertos en la historia de la Convención de Aguascalientes. Él escribió: “En el mes de octubre de 1914, en la ciudad de Aguascalientes, se reunieron los principales caudillos militares de la Revolución. Su propósito fundamental era evitar la guerra entre ellos, lograr la unificación de las diversas facciones (carrancistas, villistas y zapatistas), elegir un gobierno plural y dotar al movimiento revolucionario de un programa económico, político y social que le diera sentido y alcance nacional.
“Los buenos propósitos no fueron suficientes. Se logró una paz efímera y parcial, se dejó libres a los presos políticos, se adoptó el Plan de Ayala como plataforma revolucionaria, y se decidió prescindir de Francisco Villa y Venustiano Carranza como caudillos de la Revolución. Los dos problemas: el poder y el proyecto determinaron la división irreconocible de los convencionistas en dos bandos: villistas y carrancistas.”*
&
Aunque Zacatecas era un territorio parcialmente ocupado por fuerzas villistas, los jefes de la División del Centro (Pánfilo Natera, Trinidad Cervantes, Manuel Carlos de la Vega) intervinieron en la Convención y jugaron para procurar tener autonomía respecto de Carranza y Villa.
Los de Zacatecas apostaron por la autoridad de la asamblea revolucionaria. Lo hicieron así para ser par entre los revolucionarios y jefes indiscutibles en la entidad.
Los villistas por diferentes medios intentaron persuadir a los zacatecanos para que no osaran repeler su presencia y el proyecto político que presentaban.
&
Durante la celebración de la Convención de Aguascalientes (mes de octubre de 1914) en la vetusta ciudad de Zacatecas circuló un cartel impreso para apoyar a Francisco Villa. El documento fue firmado por el ingeniero José Ugalde. Con el título “La república se hunde. Peligra nuestra integridad nacional. Llamamiento a los buenos mexicano”. En el texto Ugalde deturpa a Carranza. Lo define como un emisario del pasado que no permitirá consolidar los logros de la revolución.
Para concluir expresa: “Todos los buenos mexicanos debemos incondicionalmente colaborar a su lado, porque en el señor general Francisco Villa, que es una garantía de orden y progreso, están sintetizados los ideales más puros de una verdadera democracia, que de seguro la historia compaginará su ilustre nombre, si como es de esperarse reivindica nuestras libertades públicas ahora vejadas por el personalismo y la ambición”.
&&
Los ingenieros del estado
El sábado 25 de octubre 1913, en la casa 62 de la calle Merced Nueva, ocurrió una reunión socialmente llamativa: el matrimonio civil del joven Manuel Sescosse Pérez (comerciante, 29 años de edad, viudo) y Mariana Lejunne Flores (Hija de comerciante, 27 años, nacida en Guadalupe). El acto formal sucedió a las 6:30 de la tarde.
El acto lo testimoniaron dos de los hombres poderosos del momento: el gobernador huertista José Delgado y el jefe político de Zacatecas, Antonio Delgadillo. Un tercer hombre también firmó como testigo: el ingeniero Miguel Macedo y Abreu.
Otros asistentes al evento fueron hombres con familia reconocidas: Luis M. Flores, Flavio Macías, Rafael de las Piedras, Victoriano González y Bernabé del Valle.
&
El hombre que nos importa es el ingeniero Macedo. Sus vínculos son evidentes y con seña ajena a la guerra civil que generó el golpe de Estado de Victoriano Huerta.
Nos interesa Macedo porque fue el hombre que operó la violenta confiscación e intervención de las haciendas del estado de Zacatecas en 1914. Lo mismo hará en Guanajuato, como ingeniero de la División del Norte; allá lo hará a fines del mismo año.
&
En el estado de Zacatecas, el ingeniero Macedo era, según el directorio gubernamental, el cuarto hombre con mayor decisión. Estaba después del gobernador, el secretario de gobierno y el secretario particular del gobernador.
Como jefe del Departamento Agrario, Macedo administró más de 150 propiedades rústicas. ¿Hubo salto de Macedo? La respuesta afirmativa es de Perogrullo. En octubre de 1913 es testigo en una ceremonia de importancia económica y social.
&
En diciembre de 1913, el periódico El Paso Morning Time trascribió una carta que Macedo escribió para alguien asentado en la Ciudad de México, en el texto afirma que sólo los amigos y colaboradores del constitucionalismo serán tratados como amigos.
En la nota el ingeniero es referido como jefe del departamento de agricultura de la División del Centro.
&
Miguel Macedo y Abreu fue sustituido el 19 de septiembre de 1914 por el ingeniero Leonardo Muñoz. Entonces a este profesor del Instituto de Ciencias le corresponderá gestionar la intervención selectiva de las haciendas del estado. Tendrá como manto programático los planes maderista de San Luis y zapatista de Ayala.
Desde el 21 de noviembre de 1914, Muñoz encabezó la comisión agraria del estado. Allí le colaboraron hombres que participaron en administraciones gubernamentales pasadas, aunque con rostros de disidencia y clase media, como los ingenieros Ambrosio Romo y Julio Peredo, y los abogados Fernando Sansalvador y el abogado Rito Soto.
*Felipe Arturo Ávila Espinosa, El pensamiento económico, político y social de la Convención de Aguascalientes, México, Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, Instituto de Cultura de Aguascalientes, 1992.
**Imagen: generales revolucionarios Pánfilo Natera y Francisco Villa, al lado un grupo de rebeldes (ca. enero / junio de 1914). Foto tomada por Mutual Film Company, archivada en Biblioteca del Congreso de Estados Unidos.