Por Gabriela García

Al presidente de México Andrés Manuel López Obrador le urge mantenerse en campaña permanente y tener movilizada a su estructura electoral así como permanecer en el ánimo de los votantes que le apoyaron en 2018. Con esta intención ha dispuesto que el 27 de marzo de 2022 se lleve a cabo la ¤revocación de mandato”, ejercicio que  estaría a cargo del Instituto Nacional Electoral (INE), y costará al erario unos 3,830 millones de pesos, mediante él los mexicanos decidirán si quieren que el presidente se mantenga viviendo en Palacio Nacional o que se retire a su famoso rancho en Tabasco.

Este jueguito democrático es una farsa, es otro engaño al pueblo de México -como lo fue la consulta para enjuiciar a los ex presidentes-, que seguramente provoca risotadas en otras naciones porque AMLO se sigue burlando de la inteligencia colectiva de los mexicanos. Aquí hemos soportado  caprichos, desplantes y todos los excesos de un mandatario que por austero renunció a vivir en Los Pinos, la residencia oficial, pero su aspiracionismo lo llevó a mudarse nada menos que al Palacio Nacional, la sede del poder ejecutivo federal.

La cosa urge, el show hace falta, y en Zacatecas también trabajan a favor de la iniciativa que promueve el mandatario, esto ha inquietado a los políticos locales del partido Morena quienes se apresuran a desarrollar todas las acciones necesarias de manera urgente para recaudar 120 mil firmas, con la ventaja de que ya llevan unas 46 mil rúbricas- con lo que ya se cumpliría la meta legal-, por tal motivo se reunieron alcaldes, funcionarios, militantes y servidores de la nación a fin de salir a todo el estado a recaudar lo faltante.  

¿Cuál es la urgencia? Resulta que según los datos de la Encuesta Mitofsky López Obrador tiene solo el 56.3 por ciento de aprobación durante octubre, casi reprobado; y a David Monreal Ávila tampoco le fue nada bien, según los datos de México Elige tiene el 34.5 por ciento de aprobación lo que lo coloca en el tercer lugar de abajo hacia arriba, aun así les gana a los gobernadores Alfredo del Mazo, del Estado de México y al futbolista metido a político Cuauhtémoc Blanco, del estado de Morelos.

 Esto ha encendido las alertas en la entidad por lo que a la 4t le urge recobrar la confianza ciudadana y deben salir pero ya al proselitismo para reconquistar a los zacatecanos. El ejército de la 4T en Zacatecas tiene poco tiempo para lograr que le den su apoyo al señor Andrés y que se quede gobernando el resto de su gobierno, así que no tardan en ir a tocar a las puertas de las casas para solicitar se entregue la credencial de los beneficiarios de alguna obra o apoyo social condicionando a los ciudadanos a quienes no queda de otra más que acceder a las triquiñuelas del gobierno en turno; no se puede esperar otra cosa más que las trampas de los funcionarios de la gobernanza.

Es necesario decir que para que se lleve a cabo la actividad democrática se requiere que al menos 17 entidades la validen y se alcance el 3 % de la lista nominal del INE, que son algo así como tres millones de firmas. La ley federal de revocación de mandato publicada el 14 de septiembre del presente año, la cual tiene como propósito reglamentar la fracción IX del artículo 35 de la Constitución, define este proceso en su artículo 5º, como el instrumento de participación solicitado por la ciudadanía para determinar la conclusión anticipada en el desempeño del cargo del titular de la Presidencia de la República a partir de la pérdida de confianza.

Así que mientras Morena está metida en el tema de la conclusión anticipada del mandato de AMLO, a los zacatecanos se nos cargan más impuestos y multas por todo: para empezar vienen nuevas placas para 2022 y en los días que transcurren se publicó la tabla de nuevas multas para quienes infrinjan el reglamento de tránsito cuyo incremento es del 100 %. Qué ironía de la política, por un lado la 4T busca recobrar la presencia lograda en 2018, pero en los hechos, a nivel nacional y local, se actúa en perjuicio del pueblo que dicen defender.