En su momento se volvió un símbolo de “libertad” para muchos, para otros el cambio que México necesitaba, para muchos más una amenaza para nuestro país. 

Nos referimos al señor que se bronquea con todos, difundidor de la versión 2.0 del chupacabras (de la Chachalaca). 

Andrés Manuel López Obrador…. 

Un hombre polémico en nuestro país, considerado por muchos un loco gracias a las campañas negras del PAN en las elecciones del 2006, gracias a los asesores del entonces candidato Felipe Calderón. 

Pero el contexto va más allá de las campañas pasadas, los recientes acontecimientos en los que se contradice AMLO son devastadores para cualquier partido, se le conoce como divisor de la izquierda nacional, porque al no cumplirse con sus imposiciones dentro del PRD, prefirió irse al PT y luego desde esa misma trinchera golpear al PRD partido en el cual aún pertenecía y sigue perteneciendo hasta la fecha. 

Pero hay más cosas de fondo dentro de los caprichos de Andrés Manuel, porque según información publicada en el Blog de Jesús Ortega, comenta que López Obrador está apoyando al PRI para que no gane la alianza en el Estado de México, ya que las alianzas tienen temblando a Peña Nieto y a sus colaboradores más cercanos, porque con esto les caería todo el peso del estado y de los izquierdistas sobre ellos. 

La razón por la que Andrés Manuel López Obrador apoya por “abajito del agua” a Peña Nieto y al PRI es porque le debe enormes favores –monetarios- a Beatriz Paredes, quien le ayudó a financiar importantes apoyos cuando era gobernadora de Tlaxcala, y además lo impulsó cuando era candidato a la presidencia, esto a razón que el candidato que tenía el PRI en ese entonces estaba en tercer lugar de las preferencias y se mostraba aún más loco que Andrés Manuel –aunque usted no lo crea-. 

López Obrador es el verdadero demoledor de la izquierda en México, en vez de aglutinarla, la divide, sino me creen para muestra varios botones o allegados a AMLO: 

Fernández Noroña.- típico loco con puesto de diputado federal y con fuero. Se dedica a atacar al ejecutivo federal a toda costa, porque goza de una pobre popularidad, en recientes hechos llamó al presidente de la república alcohólico y hasta de golpes se dio con diputados panistas. 

Rafael Acosta “Juanito”.- incansable “teibolero”, golpeador, ex actor de películas ficheras, ex luchador y comerciante ambulante. Este hombre fue el “patiño” de Andrés Manuel para ser candidato en la delegación Iztapalapa, donde prometió que después de ganar la elección, entregaría el poder al PRD, pero al final se le reveló a Andrés Manuel y quiso seguir en el puesto hasta que Marcelo Ebrard lo hizo renunciar. 

René Bejarano.- un fabuloso funcionario que fue atrapado con las manos en la masa por cámaras de seguridad recibiendo sumas demasiado fuertes del empresario argentino Carlos Ahumada. Con este hecho, Bejarano fue desaforado y sentenciado para después ser liberado. Estuvo involucrado en alegados hechos de corrupción y tráfico de influencias. 

Ricardo Monreal Ávila.- Ex gobernador de Zacatecas, en un tiempo su familia fue ligada al narcotráfico en Zacatecas porque el ejército mexicano encontró la fabulosa cantidad de 14.5 toneladas de marihuana en una bodega disfrazada de secadora de chile, la cual pertenece a su hermano Cándido Monreal. Aunque las indagatorias absuelven a Cándido, aún no se sabe quien plantó esa marihuana en la propiedad de los Monreal. 

Vaya fichitas que se carga Andrés Manuel, y ahora con su supuesta salida del PRD, intentará negociar su permanencia en el partido si Ricardo Monreal es el candidato de las izquierdas en el Distrito Federal, lo cual es una aferración del aún senador de la república, a quien no le basta con tener algo de poder, quiere tenerlo todo controlado desde Fresnillo –municipio de Zacatecas-, el mismo estado de Zacatecas, el Partido del Trabajo a nivel nacional y estatal, el senado de la república, el estado de Zacatecas –donde acomoda a su gente como es el caso de Miguel Alonso como gobernador-. 

Con gente como esta, asesorando a Andrés Manuel López Obrador, no nos cabe duda de que López Obrador es un peligro para la nación.