Por: Manuel Narváez Narváez
Email: mnarvaez2008@hotmail.com
Tuvieron que pasar 8 meses desde la toma de protesta como presidente de México, para que reconociera la urgencia de reactivar la economía y evitar una caída estrepitosa.
Por conducto de la secretaría de hacienda, el gobierno de México anunció la inyección de 485 mil millones de pesos para reactivar la economía y atenuar los efectos de la ´desaceleración económica GLOBAL´, de la que ya se sienten sus efectos, subrayó el funcionario federal que recién relevó a Carlos Urzúa en la supersecretaría.
El eufemismo utilizado por el secretario de hacienda ´desaceleración económica GLOBAL´, pretende cargarle el muertito a otros como en su momento lo hizo Felipe Calderón cuando se zafó con el petatito: ´la crisis que vino de fuera´, durante la explosión de la burbuja hipotecaria internacional de 2008.
Haiga sido como haiga sido, gobierno de López busca desesperadamente, ahora sí, atender el grave deterioro de la economía mexicana por medio de créditos para vivienda y Pymes, incentivar el consumo interno a través de Fonacot y adelantar hasta dos años algunas inversiones públicas.
Entre los proyectos del paquete económico que impulsa destacan créditos en vivienda y consumo, y obras de infraestructura carretera en algunas entidades del país, predominantemente en el centro y norte de México.
El 80% de esa lana provendrá del sector privado en asociación con el sector público y el restante 20% del El Fondo Nacional de Infraestructura (FONADIN), organismo gubernamental creado en los tiempos de Calderón Hinojosa.
El sector privado dio la bienvenida al anuncio, pero ha pedido claridad de los proyectos y definiciones en cuanto a las reglas para ejercer los recursos. Hay que considerar que estamos encaminados en el segundo semestre del año, por lo que la aprobación de los proyectos ejecutivos y las autorizaciones de la banca de desarrollo (BANOBRAS) no se hacen a la ligera.
El factor tiempo corre en contra de la disposición gubernamental porque prevé arrancar proyectos en septiembre, aprovechar el BUEN FIN y las ventas navideñas. Además, los gobiernos estatales con los que habrá participación bipartita, tendrán que echar toda la carne al asador y rascarle a las piedras para empatar recursos.
El anuncio sin duda calma un poco la presión de las calificadoras (OGTs, sin duda), y seguramente mantendrá aplacados a los demonios como la inflación, aumento de precio a las gasolinas, la paridad peso/dólar y las tasas de interés de Banxico.
Dicho anuncio es por lo pronto un petardo de buenas intenciones, porque todos sabemos que así se encuentra el camino empedrado hacia el infierno. En unas cuantas semanas se conocerán los datos macroeconómicos del país y sabremos a ciencia cierta qué tan conveniente fue la medida o qué tan tardía fue la reacción del poder ejecutivo federal.
En otra pista corren con singular proyección mediática los escándalos de persecución judicial contra dos importantes ex secretarios de Estado durante la gestión de Enrique Peña Nieto.
Las ordenes de captura contra Emilio Lozoya y Rosario Robles, así como la del sempiterno dirigente del sindicato de PEMEX, Carlos Romero Deschamps (El senador por MORENA, Napoleón Gómez Urrutia fue perdonado), todos por presunta malversación de fondos, compiten por los titulares de 8 columnas contra la recesión económica técnica que ya se siente, reconoce el titular de hacienda.
De nada sirve emperrarse con posturas rígidas y obsoletas. Es mejor, como diría alguna vez un excandidato presidencial: “es de sabios cambiar de opinión”.
P.D. En las siguientes entregas abordaremos el tema de las leyes conservadoras que violentan los derechos humanos, como la Ley garrote aprobada por el congreso de Tabasco y la de extinción de dominio aprobada por la cámara de diputables.