- Sin reforma educativa de gran calado, la política y los políticos habrán fracasado en Zacatecas.
- Urge el rescate financiero del sector educativo que padece lastres vergonzantes.
- El nuevo rol del SNTE, la eliminación de los comisionados y el golpe al corporativo de la enseñanza.
En el fragor de la competencia electoral que este año se vive para renovar los poderes ejecutivo y legislativo, así como los gobiernos en los 58 municipios del Estado, existe un tema crucial para la sociedad <del que depende su futuro>, que todas las fuerzas contenientes tendrán que colocar en el centro de su atención, que es el relacionado con el impulso de la reforma educativa que Zacatecas requiere para su desarrollo. Sin educación de calidad, jamás podrá hablarse de la defensa de los derechos ciudadanos. Tampoco la entidad tendrá perspectivas de cambio.
La educación de calidad, la formación de capital humano y la creación de una auténtica sociedad del aprendizaje, es lo único que puede garantizar mejores los niveles de bienestar, de crecimiento económico y la reducción los índices de desigualdad. Sólo eso permitirá saltar el horizonte fatalista que hace que Zacatecas sea una de las 10 entidades que produce mayores volúmenes de pobreza en el país.
Los candidatos, los partidos y los contendientes en el proceso electoral de este año, tienen por lo tanto, la obligación de privilegiar una agenda estatal mínima que auspicie una reforma educativa de calidad de gran calado que ponga en el debate público algunos puntos fundamentales, entre los que destacan los siguientes: 1).-El saneamiento financiero del sector educativo; 2).-la modernización de su modelo administrativo, para superar los lastres penosos de ineficiencia y corrupción que padece; 3).-la creación de un renovado paradigma de formación de profesores; 4).-la reforma de contenidos, de planes y programas de estudio; y 5).-el establecimiento de un sistema riguroso de rendición de cuentas y de evaluación integral a todos los componentes del sistema educativo, incluyendo a sus autoridades. Estos son algunos de los muchos expedientes no resueltos del sistema de enseñanza público en Zacatecas.
En materia educativa se requiere en Zacatecas que los actores responsables asuman y realicen sin pretexto su tarea, sin esperar que la federación acuda a resolver nuestros problemas escolares. Y vaya que en la historia del Estado, existen verdaderos ejemplos de éxito que se deben reivindicar y recuperar.
En el siglo XIX, posterior al movimiento de Independencia, es Zacatecas, de la mano de Francisco García Salinas, quien postuló a la nación (-en 1832-) la primera gran reforma educativa de corte liberal que consagró, < como nadie lo había hecho hasta entonces> los principios de laicidad, gratuidad y obligatoriedad. El federalismo se convirtió en un espacio de iniciativas creadoras en donde los políticos zacatecanos mostraron capacidad de acción, para dejar atrás la condición de ser únicamente mudos testigos de sal, frente a los procesos de cambio nacional.
EL NUEVO IMPULSO A LA REFORMA EDUCATIVA NACIONAL
Y es precisamente desde la perspectiva de un razonable federalismo cooperativo, -alejados del protagonismo violento de la confrontación con el gobierno de la república-, a partir del cual Zacatecas puede hacer presencia en el marco de la reforma educativa nacional, la que por cierto, ha adquirido en este mes de enero un renovado ímpetu legitimador, debido al nuevo plan <La Escuela al Centro>, que ha dado a conocer el Secretario de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño.
Dicho programa contempla implementar en el presente ciclo, Las Escuelas de Verano, que permanecerán abiertas durante las vacaciones para coadyuvar en la formación de los educandos en actividades deportivas y culturales. Se prevé además modificar de fondo el calendario escolar. El objetivo de estas y otras acciones, es hacer de los planteles escolares, centros detonantes del desarrollo comunitario.
Se pretende avanzar igualmente en la reforma nacional de los contenidos pedagógicos de los planes y programas de estudios de la educación básica y por si fuera poco se ha modificado radicalmente la oferta de licenciaturas destinadas a la formación de docentes, con lo cual se mueve el tradicional centro de gravedad y se revoluciona el sistema de escuelas normales, hoy en evidente crisis.
Hay otro hecho sin precedentes en el ámbito administrativo del sector educativo: se tomó ya la decisión de eliminar definitivamente la figura de los maestros comisionados “al sindicato”, lo que conducirá a la regulación de más de 19 mil plazas de profesores (bajo un acuerdo jurídico distinto) que hoy se desempeñan en el país en tareas de representación sindical, con cargo al erario público. Lo anterior se traduce en un golpe seco y mortal a la visión corporativa y patrimonialista de la enseñanza pública, con el objetivo de que la promoción laboral de los docentes en servicio quede sujeta a exclusivos criterios de racionalidad académica y no de meritocracia ideológica y política. De facto, se modifica el papel histórico del SNTE en el sistema educativo mexicano, que rompe con una cultura de casi 70 años, que no se había tocado.
LA REFORMA EDUCATIVA QUE ZACATECAS REQUIERE PARA SU DESARROLLO.
El 2016 será, de hecho, un año crucial y decisivo para forjar un nuevo sistema educativo más funcional que sirva al desarrollo de Zacatecas. Este es un gran compromiso que tienen los protagonistas del proceso electoral, en particular el candidato a gobernador que resulta triunfador. Si no se cubre este reclamo, entonces, una vez más habrá fracasado la política y los políticos.
Y es que la educación de calidad y la formación de capital humano, son las dos mejores fuentes de transformación de la sociedad, como bien lo dijo en alguna ocasión Robert M. Solow (1924…), Premio Nobel de Economía 1987, en sus tratados y estudios realizados sobre el impacto de las tecnologías en el desarrollo de las sociedades.