Durante encuentro con jóvenes zacatecanos, Carlos Peña Badillo reconoció la importancia de su participación en los procesos electorales y su inclusión en la toma de decisiones y subrayó que ahora con su voz y su voto serán determinantes en la elección del primero de julio.
El candidato de la Coalición Todos por México destacó que los jóvenes representan el 40 por ciento de la población del país y, hoy por hoy, en este proceso electoral tan determinante para la vida de México, uno de cada tres candidatos es un jóven que busca posicionarse en los procesos de desarrollo. Particularmente en el crecimiento de Zacatecas.
Ante un panorama excelente de participación de los jóvenes, Carlos Peña, el candidato a diputado federal por el Tercer Distrito les pidió que no tengan miedo a la confrontación y menos si es de ideas.
Peña Badillo puso de ejemplo el trabajo político que ahora realizan los jóvenes del Movimiento Juvenil Zacatecano, capítulos Zacatecas y Río Grande, representados por Juan Antonio Ramírez Muro y María Fernanda Abraham García, así como Juan Pablo Noyola Juárez y Marisol Canales Sánchez, respectivamente, quienes realizan una intensa actividad convocando a la participación consciente y abierta por la política.
A los jóvenes zacatecanos Peña Badillo les externó su compromiso generacional y les ofreció su acompañamiento para que sigan creciendo y desarrollando sus ideas, porque Zacatecas los necesita a todos en la construcción de un mejor futuro.
Por eso les pidió que con toda lucidez y razonamiento valoren las opciones políticas actuales y vean que José Antonio Meade, el candidato a la Presidencia de la República es la más seria y sostenible de esas opciones, tanto por su preparación, como por su experiencia en el servicio público y en la construcción de políticas públicas.
También pidió que se valoren las candidaturas de Claudia Anaya y Raúl Rodríguez, aspirantes al Senado, porque han dado muchas muestras de capacidad y resultados.
Por último Carlos Peña les pidió confianza en él y consigo mismos, porque deben reconocer que ya no son el futuro, sino el presente y nuestra realidad en Zacatecas y en México.