Por Gabriela García

Activista del Movimiento Antorchista de Zacatecas

La democracia en México bajo el gobierno de la 4T se  está reduciendo a utilizar a las clases más desprotegidas de nuestro país, principalmente a los adultos mayores y estudiantes en potenciales votantes frente al proceso electoral 2021. El gobierno federal es el principal promotor  del voto a favor del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y donde tiene mayor impacto es con los beneficiarios de los programas sociales quienes se están mostrando agradecidos, pero poco reflexivos ante la estrategia de campaña operada a través de los servidores de la nación.

Esto sucede porque los mexicanos no están educados políticamente para que permanezcan y defiendan un ideario, para que analicen temas políticos, sociales o económicos y participen activamente en la solución de sus problemas, esta situación ha empeorado al asumir el poder la 4t, donde la democracia constriñe la participación ciudadana al acudir a las urnas y dando por hecho que todo cambiaría una vez depositado el sufragio en 2018.

Como consecuencia de lo anterior tenemos un conformismo por parte de buen número de mexicanos que reciben las ayudas monetarias quienes no ven o no les interesa saber que al destinar el recurso de todos a esas transferencias económicas se ha dejado en el abandono a millones de personas, que como los damnificados de Tabasco y otros estados del sureste mexicano se lamentan la desaparición del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN), para destinar este dinero a los programas electoreros de AMLO, mientras ellos literalmente tienen el agua en el cuello y no hay nadie que les brinde ayuda.

Es necesario comparar como en sexenios pasados se registraba gran número de obras en  comunidades y colonias marginadas del país en distintos rubros operados a través de instituciones gubernamentales; a ellas se dirigían las solicitudes de carreteras, hospitales, escuelas y servicios básicos para esos lugares como drenaje, agua entubada, electrificación, etc., pero que ahora ya no pueden hacerse por la falsa austeridad.

Algunas gentes aplauden que esto sea así porque aceptan que se justifica la medida por la corrupción en estas acciones, pero olvidan que aunque algunos adultos mayores y jóvenes estudiantes tengan el efectivo destinado por AMLO que cubre algunas necesidades, en realidad los sumió en una mayor marginación al no tener obras y servicios que producían bienestar y desarrollo general.

Si hablamos de los estudiantes que reciben sus becas, de todas maneras no tienen la capacidad material para continuar sus estudios, pero que ya Morena los registró en su padrón para garantizar que en las elecciones 2021 triunfe su partido, que no haya duda serán manipulados para lograr su objetivo y lo mismo pasará con quienes reciben la pensión del bienestar.

Por lo dicho, se debe explicar a los beneficiarios, que no están obligados a dar su voto a los candidatos a senadores, diputados y presidentes quienes se postularán en las próximas elecciones a cargos públicos por el partido de AMLO, pues esos recursos son de los mismos impuestos  que estaban destinados a los programas sociales desaparecidos por la 4t.

Los mexicanos cerramos el año 2020 con la claridad de que el gobierno federal perjudicó a la clase trabajadora en muchas formas, pero con la ventaja de que quienes votaron por él se encuentran decepcionados al ver que se olvidó de las promesas de campaña y esperan termine el sexenio actual y que en el próximo se reconstruya lo que se alcance a salvar, por eso es necesario que a una sola voz y en una sola fuerza denunciemos que los recursos de todos se concentran para operar las elecciones de 2021, para que divulguemos los abusos de poder y votemos en contra de Morena y para detener a quienes nos gobiernan de forma irresponsable.