La sorpresa del día a minutos que se le entregue su constancia como Presidente Electo a Andrés Manuel López Obrador fue la liberación o absolución de Elba Esther Gordillo.
Se le imputaban evasiones a la ley como lavado de dinero y delincuencia organizada al inicio del sexenio de Enrique Peña Nieto.
Pero la hábil de Gordillo le hizo «ojitos» al Peje para que se le pudiera liberar de sus presuntos delitos de los cuales por la madrugada se le absolvieron como por arte de magia.
La unión o presunta alianza entre AMLO y EPN da mucho de qué pensar, tanto es así que la gente especula en su mayoría que existe ese acuerdo entre ambos y taparse entre ambos sus «triquiñuelas» de las que tanto habla la gente.
Si el río suena, es porque agua lleva….