Noemí Luna
Diputada Federal
El Gobierno de México es rehén del Gobierno de Estados Unidos. El chantaje son los aranceles del 25 por ciento que el Presidente Donald Trump amenaza con imponer a los productos mexicanos que se exportan al vecino país.
La moneda de cambio por la cual el estadounidense aceptó pausar un mes la aplicación de los aranceles es que México se convierta en el “muro” de Trump… otra vez.
El 3 de febrero no se aplicaron los excesivos aranceles a México porque la Presidenta Claudia Sheinbaum aceptó enviar 10 mil elementos de la Guardia Nacional (GN) a las zonas limítrofes de nuestra nación para detener la migración indocumentada y tráfico de drogas, especialmente fentanilo.
Así es, miles de militares pagados con recursos públicos de las y los mexicanos no protegerán ni pacificarán los estados con problemas de inseguridad, asesinatos, desapariciones y enfrentamientos. Fueron enviados a proteger la frontera sur de USA.
Sheinbaum imitó a López Obrador para ganar tiempo, lo que no le servirá de mucho, porque la amenaza se cumplirá cuando México no dé los “resultados” exigidos.
¿Por qué no cumplirá? Porque la administración morenista mantiene la fallida estrategia lópezobradorista de “abrazos no balazos”; sigue la destrucción del Poder Judicial y la “tómbola” para imponer juzgadores a modo; desapareció los organismos autónomos y carece de una propuesta a la migración y deportaciones masivas.
Con esos desaciertos el Gobierno de México perdió la confianza del país de las barras y las estrellas.
La desconfianza la manifestó la Casa Blanca al afirmar que el Gobierno mexicano ha proporcionado un refugio seguro a los cárteles para que se dediquen a la producción de drogas. Sin tapujos, lo llamó “narcogobierno”, por la complicidad con criminales. ¡Y no se disculpó!
En el PAN apoyamos el libre comercio y estamos en desacuerdo que se utilice la política comercial como amenaza o chantaje, puesto que los afectados serán los consumidores de ambas naciones con la elevación de precios. De la misma forma, estamos en contra de los cárteles, el tráfico de enervantes y la migración indocumentada.
Exigimos que cada gobierno implemente medidas de atención y que conjuntamente establezcan colaboración y cooperación para resolver. Sin intromisión ni imposiciones unilaterales. México no es el patio trasero de Estados Unidos.
Urge que la Presidencia de la República deje la improvisación, aplique una estrategia de defensa comercial, diversifique sus relaciones de comercio, elimine los abrazos a los delincuentes y enfrente a los cárteles.
Noemí Luna
Diputada Federal