El presidente municipal de Guadalupe, Julio César Chávez Padilla,  miente, calumnia y divide a los guadalupenses, sostuvo el presidente del comité directivo municipal (CDM), del PRIHermann Hernández Ponce, porque tiene una política de privilegios para unos cuantos y menosprecio para la población.

En conferencia de prensa, el dirigente del priismo en Guadalupe estableció su posición del primer informe de gobierno de Guadalupe, y exigió a Chávez Padilla dar cuentas claras con hechos y no con palabras, porque no se ve la austeridad que pregona y presume que la nómina del Ayuntamiento es una de las más altas a nivel estatal.

Hernández Ponce lamentó que el municipio no cuente con un plan de desarrollo claro que ayude con la transformación y crecimiento del municipio, y aseguró que a través de los regidores priistas se exigirán resultados a favor de los guadalupenses.

“En Guadalupe no tenemos rumbo claro, no hay proyectos específicos, no hay un plan o una estrategia que ayude al crecimiento. Las colonias y comunidades se han abandonado, tenemos un Presidente Municipal que se la pasa desprestigiando en lugar de ponerse a trabajar”, indicó.

En respaldo a los priistas de Guadalupe, el presidente del Comité Directivo Estatal (CDE), Gustavo Uribe Góngora, hizo un llamado enérgico a que el Presidente de Guadalupe trabaje con seriedad, rectitud, honradez y claridad por el bien de los habitantes de este pujante municipio.

Destacó que el primer informe de gobierno fue sin clarificar datos, sin cumplir promesas y con el mismo afán con que empezó esta administración, desprestigiando a los demás para prestigiarse a sí mismo.

Calificó que se está a un presidente municipal que se mueve más por intereses mezquinos de la política, y agregó que a unos días de iniciar su gestión acusó a los anteriores presidentes de heredarle una deuda de más de 900 millones de pesos, que en la actualidad no ha podido demostrar porque es un argumento falso.

Agregó que, pese al discurso de austeridad, en el primer informe hubo derroche de recursos para contratar mobiliario para el escenario del evento, además de los grandes salarios de sus colaboradores.

Recordó que al iniciar la presente administración hubo unos 300 despidos injustificados, y en algunos casos por tener afinidad partidista, pero que al final los trabajadores ganaron sus demandas por no respetarse sus derechos.