A la brevedad posible se dispersarán los recursos que cubran los salarios de las y los maestros correspondientes a la segunda y tercera quincenas del año, informó el gobernador David Monreal Ávila.
Informó, en un mensaje en redes, que la Secretaría de Finanza (Sefin), se verá en la necesidad de destinar al magisterio recursos que se tenían contemplados para obras públicas, sector salud, desarrollo social y para el campo.
Acompañado por Ricardo Olivares, titular de la Sefin, y por la secretaria de Educación de Zacatecas (Seduzac), Maribel Villalpando Haro, insistió que el estado atraviesa un momento difícil, producto de los malos manejos de las últimas administraciones.
Recordó que se recibió un estado endeudado, en quiebra financiera técnica, asolado por la inseguridad y gravemente lastimado por la corrupción. Sabedor de lo que enfrentaría, decidió asumir el compromiso y buscar soluciones de fondo a las distintas problemáticas que aquejan a la entidad.
Y a los maestros por haber soportado las consecuencias del desastre administrativo de los últimos sexenios, así como el proceso de reordenamiento financiero que inició con esta administración.
Recalcó que éste es el único camino para encontrar una solución al grave problema de la nómina magisterial, que derivó de no haber sido cubierta en 2015 por el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo, como sucedió con la mayoría de los estados, o de no incluirla en el Fondo de Compensación del FONE, para que el apoyo llegara de forma directa, y no a través de la gestión permanente.
Subrayó que, desde el inicio de su administración, ha encabezado las gestiones ante la Federación para que se corrija ese error y se transfiera al Estado lo que le corresponde, con lo que se dejaría de sacrificar el desarrollo de otros sectores para cubrir las obligaciones con el magisterio.
Agregó que se trata de un asunto de justicia, de orden y de convicción por hacer el trabajo no sólo de manera distinta, sino legal y moralmente correcta. Agregó que, con el apoyo del Presidente de la República, se podrá salir adelante.
Al avanzar en el cumplimiento de los compromisos con la Federación, admitió que las y los maestros no pueden seguir sin percibir sus salarios hasta encontrar una solución conveniente para el estado, por lo que se tomó esta determinación consciente de los riesgos legales que implica para la administración pública.
El pago se hará con la convicción de que es un reclamo justo y legítimo del magisterio, pero aclaró que es una sólo una solución temporal, y seguirá la solicitud de apoyo para el rescate y la cobertura de la nómina magisterial de manera ordenada.