Más de 50 mil campesinos del Frente Auténtico del Campo se concentrarán el 31 de enero en el Monumento a la Revolución para manifestar su rechazo al incremento en el costo de los combustibles y demandar la derogación de la reforma energética que ha derivado en un incremento en el costo de la gasolina de 47% durante la actual administración.
En conferencia de prensa, Federico Ovalle de la CIOAC, Marco Antonio Ortiz de la CODUC y Francisco Chew del Movimiento Social por la Tierra, MST anunciaron acciones de protesta en todo el país que se intensificarán a partir del lunes próximo con la toma de casetas y cierre de carreteras, como medidas de presión para revertir las alzas que afectan a la mayoría de los mexicanos.
Federico Ovalle, dirigente de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos, CIOAC, dijo que el FAC rechaza de manera categórica el anuncio y la medida del gobierno instrumentada a partir del primero de enero, que trajo consigo un incremento de un 15 y 20 por ciento a la gasolina y el diésel. “Este aumento, junto con los otros aumentos de los cuatro años de gobierno de Peña Nieto representan un incremento al precio de la gasolina de 47% en este momento” precisó.
Esta decisión de un gobierno, que dijo que no iba a haber un gasolinazo, representa un duro golpe a la economía de los campesinos y productores, para quienes habrá repercusiones muy negativas. Federico Ovalle indicó que hay estudios que señalan que el costo de producción y la carestía se habrán de incrementar en 35 y 40% en los primeros 3 meses del año, lo que hace que las consecuencias las pagaremos los consumidores y los productores.
“Hemos acordado en el FAC deslindarnos de manera muy firme de muchos actos de provocación que vienen desde el propio gobierno; son actos de rapiña y saqueo que están afectando al comercio y tienen la pretensión de desviar la atención del anuncio del aumento de los precios de los combustibles y energía eléctrica” precisó el líder de la CIOAC.
Por su parte, Federico Chew, del Movimiento Social por la Tierra destacó que en las protestas, a las que se ha sumado el FAC, está el rechazo a la política económica, a las reformas y a la burocracia dorada que, para cargarle el costo de la crisis al pueblo se ha auto-privilegiado. El reclamo de la población es que se cancelen los privilegios de los altos funcionarios y de los legisladores. Prueba de ello son los escandalosos bonos que se dieron a fin de año los diputados, más los 20 millones que se asignaron para hacer obras de gestión pública, que es el origen de los famosos moches.
La liberalización de los combustibles se adelantó en el calendario de la reforma, ya que el Gobierno Federal decidió cargarle el nuevo impuesto ante la necesidad que tienen de ingresos por el boquete presupuestal que se ha generado como efecto de la reforma energética, añadió.
A su vez, Marco Antonio Ortiz, de la Coalición de Organizaciones Democráticas y Campesinas, CODUC, anunció las movilizaciones que se incrementarán a partir del próximo lunes en rechazo al llamado “gasolinazo” y dijo que el FAC asume las responsabilidades legales y políticas que se deriven de estas acciones.
Informó que la organización que dirige detectó a agentes, fundamentalmente del Estado de México, a los que se les paga 800 pesos por asistir a hacer desmanes en otras entidades. “Hoy el gobierno está generando actos de provocación con jóvenes infiltrados para que se genere una represión mayor” dijo.
Por ese motivo anunció que el 31 de enero, alrededor de 50 mil campesinos llegarán a la Ciudad de México para reclamarle al gobierno la política pública que cada vez provoca mayor pobreza; la renegociación del TLC y la derogación de la reforma energética.