POLÍTICA AL MARGEN

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logo direccionesPor Jaime Arizmendi

 

*Opaca Anarquía Logros de México

*Incursión de PGJDF en CU, Orquestada ¿de Parte de Quién?

 

Argonmexico / Alguien tiene que pararlos… A solo unos meses de que inicie el proceso electoral 2015, la crispación social tiende a convertirse en una ola nacional, a veces violenta, por el reclamo de que aparezcan con vida los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Más aún, su vorágine, que ya sacó del gobierno de Guerrero a Ángel Aguirre Rivero y tiene en la cárcel al exedil de Iguala y a su esposa; ahora se torna contra la dirigencia del PRD.

En todo ello, la nefasta acción de los “anarquistas”, grupos de encapuchados que aparecieron destruyendo todo a su paso el 1 de diciembre de 2012, mientras Enrique Peña Nieto tomaba posesión como Presidente de la República, se repite cada vez con mayor dureza en Guerrero, Oaxaca, Michoacán, el DF y otras entidades del país.

Además, en menos de dos semanas el Presidente de México cumplirá dos años de haber asumido el mando de la Nación y un día después, en su primer acto público, anunció la creación del Pacto por México, en cuyo marco su gobierno marchó de la mano con PAN, PRD y PRI, las tres principales fuerzas políticas, para modernizar juntos al país y estructurar también la proyección internacional.

Su objetivo era claro: mover a México en la era digital, enfrentar los monopolios del Estado y privados, impulsar una nueva reforma política, y por lo menos otras 10 reformas que lograran el reconocimiento de las naciones industrializadas; que rompieran las barreras culturales y tradicionales que impedían el desarrollo de México, onceava economía del mundo. 11 de 187 países.

La señal enviada al concierto mundial fue trascendental. Una tras otra, las reformas se concretaron en el legislativo, no como algo fácil. Algunas iniciativas sufrieron marcados cambios respecto a como llegaron al Congreso de la Unión. Pero se trataba de que contaran con el mayor aval posible de legisladores.

Cierto, el presidente Peña Nieto pudo dar un nuevo rostro a México en el concierto internacional. Ha realizado giras de trabajo que han fortalecido la cooperación con Centroamérica y el Caribe. Con Cuba en especial y con América del Sur recobró el nivel del diálogo; mientras que lo hizo crecer con Canadá y Estados Unidos.

En su último viaje a China consolidó la alianza Asia-Pacífico. Vale recordar que ambas naciones han intercambiado visitas oficiales. En abril de 2013 Peña Nieto visitó por primera vez a la cada día más poderosa nación asiática; en tanto que el mandatario chino, Xi Jinping visitó México en junio de ese año.

Entonces, lanzaron una declaración conjunta, para anunciar que las relaciones bilaterales se llevarían a un nuevo nivel de cooperación acordando una alianza estratégica integral, y abrieron sus mercados a nuevos productos; ofrecieron elevar el flujo turístico, promover la cultura de los dos países y aumentar las becas y el intercambio educativo.

Todo ha ido viento en popa, hasta que el pasado 26 de septiembre, un descerebrado ordenó detener a como diera lugar, los camiones repletos de estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, quienes protestaban en Iguala, Guerrero. El saldo de la balacera emprendida por policías municipales: seis jóvenes muertos en el lugar, 16 heridos y 43 “capturados” que desde entonces “desaparecieron”.

A esta salvaje agresión le ha seguido una creciente indignación dentro y fuera del país. Aunque por su presunta participación, el exalcalde de Iguala y su esposa fueron detenidos el pasado 4 de noviembre; las marchas, paros en universidades, tomas de oficinas públicas y partidistas con incendios de todo lo que se les ocurra, bloqueos en carreteras y casetas de peaje, ya paralizan la economía en regiones. No se diga en Acapulco.

Pero es claro que nadie se organiza solo. Siempre se requiere de alguien que aporte dinero para cubrir los gastos de toda movilización de la gente. Esto aparte de que también alguien tuvo que orquestar el choque y el consecuente repudio social. A qué jefe se le ocurrió enviar un grupo de “investigación” de la Procuraduría de Justicia capitalina a Ciudad Universitaria el sábado último.

Mediante un comunicado oficial, la PGJDF informó que un secretario del MP, un policía de Investigación y dos peritos acreditados, acompañados de un abogado de la UNAM, acudieron el sábado a CU a efectuar una “diligencia”, porque tres días antes, a una estudiante le habían robado su celular dentro de las instalaciones universitarias.

Al encontrarse frente a la Facultad de Filosofía y Letras los servidores públicos fueron agredidos de forma verbal y física, por unas 20 personas, quienes pretendían retenerlos. El policía de Investigación dijo haber realizado disparos al aire para evitar el ataque, pero lesionó en el muslo izquierdo a un “estudiante” de 31 años de edad quien se encontraba en el sitio.

Por ello, “anarquistas” enquistados en la UNAM arremetieron contra el policía y lo tundieron a golpes, quemaron el vehículo oficial e intentaron infructuosamente tomar el edificio de Rectoría; en tanto, el golpeado tuvo que ser conducido a un hospital.

Un día después, el secretario de Gobierno del GDF ofreció disculpas por el suceso, y la Procuraduría anunció que el policía quedaría en calidad de detenido en el hospital, para enfrentar un proceso judicial. Pero la crispación social no cesa. Y como en Guerrero, hay quien hasta pide la renuncia del mando gubernamental. Los errores cuestan, y qué esperar, si el titular de la PGJDF ya iba en caída libre…

En esa debacle está la dirigencia nacional del PRD, que se sabe apoyó con todo la candidatura de José Luis Abarca para la presidencia municipal de Iguala. Así lo advierte Cuauhtémoc Cárdenas, su fundador y líder moral; pero los Chuchos, en espera de que haga su tarea la desmemoria colectiva, parecen decir: ni los veo, ni los oigo…

En el marco político sobresale la sensatez del presidente nacional del PAN, Ricardo Anaya, quien plantea revisar a fondo la situación de cada caso y hallarle la mejor solución a través del diálogo. Pero toda decisión debe ir acompañada de un análisis serio, objetivo y prospectivo de dónde y cuándo aplicar la fuerza. Pero hay que identificar a quién o quiénes promueven y sufragan movilizaciones y anarquistas; porque no viven del aire…

 

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