A raíz del debate suscitado por la publicación de los nuevos libros de texto gratuitos y las alusiones que han surgido sobre el papel de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM), nos permitimos hacer las siguientes precisiones:

1.       La CANIEM agrupa a más de 220 empresas –todas mexicanas, independientemente de donde está su casa matriz– dedicadas al desarrollo de contenidos, la edición, producción, distribución de libros y revistas.

2.       Desde hace más de 25 años, el Estado Mexicano contrata distintas editoriales agremiadas a la Cámara (treinta y dos, hoy en día) para crear contenidos de calidad para la elaboración de los llamados libros de texto gratuitos para los grados de secundaria. Hasta el año pasado, lo hacían conforme a programas académicos desarrollados por la Secretaría de Educación Pública, conforme lo exige la Ley.

3.       Este esquema garantizaba la bibliodiversidad y la libre selección de los libros por parte de más de 314 mil maestros en el país, con base en las particularidades de cada materia y de los entornos de alumnos y profesores. Los libros de texto creados por las editoriales afiliadas a la CANIEM se distribuían en más de 30 mil escuelas secundarias y beneficiaban a más de 5.5 millones de alumnos en las escuelas secundarias públicas de todo el país, con ediciones reconocidas a nivel nacional e internacional por su rigor pedagógico y científico, así como por su actualización constante y alta calidad gráfica.

4.       La experiencia y conocimiento del oficio de las 32 editoriales contratadas por el Gobierno, aunados a las economías de escala, permitían ofrecer al Estado Mexicano libros de texto a precios significativamente más bajos de su valor en el mercado: hasta 10 veces menores al precio de venta al público.

5.       Sólo en el programa de libros de texto de secundaria, las editoriales responsables generan empleo para más de seis mil especialistas, que incluyen a autores, editores, investigadores, ilustradores, iconógrafos, fotógrafos, correctores y diseñadores.

6.       Contrario a lo que algunos funcionarios públicos han expresado, ninguna editorial privada participa en la elaboración de los libros de texto gratuitos para los grados de primaria. Tampoco participa ninguna de nuestras empresas en los procesos de impresión y distribución de estos libros.

Finalmente, queremos recordarle a la opinión pública que la industria editorial es un pilar fundamental del desarrollo cultural y educativo de nuestro país.

A los editores afiliados a la CANIEM nos guía el firme objetivo de dar continuidad y progreso a la industria editorial mexicana, brindando a nuestros lectores historias que inspiran y entretienen, que les permiten soñar y conocer otros mundos a través de los libros, así como formando a nuestros estudiantes con contenidos de la más alta calidad y solidez, sustentadas en información científica verídica y relevante.

Hoy, como hace 60 años, estamos en la mejor disposición de seguir trabajando con las autoridades educativas para impulsar la educación y el aprendizaje en México.