La senadora Claudia Anaya Mota presentó su primer informe de labores, en el que destaca su participación en la elección de 15 magistrados electorales, secretario de relaciones exteriores, secretaria de la función pública, ministro de la suprema corte de la nación, el fiscal general, entre otros, y la presentación de 14 puntos de acuerdo.
En el evento, en el Centro Platero de Guadalupe, Zacatecas, estuvieron presentes los senadores Beatríz Paredes, Miguel Ángel Osorio Chong, que reconocieron su trabajo y participación en la cámara, y el gobernador Alejandro Tello.
En el trabajo legislativo, Claudia Anaya participó en nueve comparecencias de funcionarios en comisiones, en la elaboración de la Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, que reglamenta la organización, funcionamiento y ejercicio de sus atribuciones.
Llamó a defender las instituciones del país, y a no permitir que el entramado institucional se desmantele, porque hasta el momento se han emprendido cuatro acciones para debilitarlas. La primera de ellas, dijo, a través de los recortes presupuestales, tal como ha estado sucediendo con el CONEVAL (Centro Nacional de Evaluación), el INE (Instituto Nacional Electoral) y el INEGI (Instituto Nacional de Geografía y Estadística).
La segunda, a través del ejercicio de la mayoría en el Poder Legislativo tanto en la Cámara de Diputados como de Senadores, que concretaron la terminación de importantes órganos que permitían el desarrollo y la autonomía de las y los mexicanos, tal como sucedió con el INADEM (Instituto Nacional del Emprendedor) y el INEE (Instituto Nacional para la Evaluación Educativa) y en particularmente en este tema, hizo votos por que el Estado Mexicano no renuncie a la rectoría de la educación pública.
La tercera forma de debilitamiento, consiste en denostar el funcionamiento y los funcionarios que laboran en ellas para infundir el rechazo social, tal como ha sucedido con el Instituto Nacional de Información Pública y la Comisión Nacional de Derechos Humanos, al rechazar y no acatar sus recomendaciones.
La cuarta forma, consiste en “envenenar” a las instituciones por dentro, es decir, cuando se desempeñan perfiles que nos son aptos para el grado de responsabilidad que se deben reunir en conocimientos técnicos y a modo de ejemplo, citó la Comisión Nacional de Hidrocarburos, donde al parecer, los perfiles presentados tienen como común denominador la sumisión ante el Poder Ejecutivo: “Eso es muy delicado porque en esencia, esta Comisión debe de gozar de plena autonomía para desempeñar adecuadamente su función de árbitro de la inversión energética” y advirtió: “No nos soprendamos que el día de mañana ya no tengamos inversión en este sector.”
Por las anteriores razones, hizo un llamado a que todos desde nuestras diferentes trincheras, defendamos las instituciones porque “sirven para evitar cualquier abuso de cualquier autoridad y ello no conviene al México fuerte que deseamos construir, con una división de poderes real y que éstos sirvan verdaderamente a la gente”.