Un equipo de investigación dirigido por el arqueólogo Ivan Šprajc ha realizado importantes descubrimientos en una vasta área despoblada del centro de Campeche. La reciente temporada de campo, realizada entre abril y mayo de 2024, se centró en la zona selvática del municipio de Calakmul, abarcando una extensión de aproximadamente 140 kilómetros cuadrados en la Reserva de la Biosfera Balam Kú. El trabajo fue financiado por la Agencia Eslovena de Investigación e Innovación y la Milwaukee Audubon Society, entre otros.
Šprajc y su equipo, conformado por destacados arqueólogos como Octavio Esparza Olguín y Atasta Flores Esquivel, encontraron que la región, caracterizada por humedales y terrenos rocosos, tiene una menor densidad de restos arqueológicos comparada con áreas vecinas. Esto se debe, en parte, a las condiciones desfavorables para la agricultura, con pocos asentamientos de tamaño modesto y escasos monumentos. Aun así, se identificaron estructuras notables, como una plaza principal con una construcción piramidal y un canal de drenaje en un cerro prominente cerca del sitio Nadzcaan.
El equipo también exploró otro sitio que, aunque no extenso, reveló una importante estructura cívico-ceremonial con edificios de hasta 13 metros de altura y una cancha de juego de pelota que podría datar del periodo Clásico Temprano. En otra ubicación, se encontró una pirámide de 16 metros con una ofrenda que incluye restos cerámicos y una punta de pedernal, indicando actividad humana hasta el Posclásico Tardío (1250-1524 d.C.), mucho después de la desintegración de las entidades políticas en las Tierras Bajas Centrales.
Estos descubrimientos aportan una visión más detallada y diversa de la cultura maya en Campeche, resaltando las peculiaridades regionales y la variabilidad cultural. A pesar de las condiciones menos favorables, los hallazgos sugieren una ocupación humana significativa y contribuyen al entendimiento de la historia y evolución de esta región.