Bajo el encanto de una de las voces legendarias del soul, el R&B y el pop estadounidense, la Plaza de Armas de la capital se vistió de misticismo y serenidad con la presencia de Dionne Warwick.

Por primera vez el máximo escenario fue seducido con las notas de una intérprete que ha permanecido vigente durante 50 años y se ha colocado con más de 75 hits en listados internacionales de música a nivel mundial.

Dionne Warwick trajo a Zacatecas los suaves sonidos que distrajeron a los jóvenes de la postguerra para brindarles un aliento a través de la música, manifestó sentirse emocionada de visitar por primera vez Zacatecas y presentarse en esta magna celebración.

“Me da mucho gusto ver a tantos jóvenes en mi concierto”, dijo la también impulsora de programas educativos y altruistas que ha sido embajadora de la UNICEF y es propietaria de una escuela heredada de su abuela, en Nueva Jersey.

Acompañada de la Orquesta Filarmónica de Zacatecas, así como de la agrupación que ha musicalizado sus conciertos durante varios años, Dionne Warwick agradeció al Gobernador del Estado, Miguel Alonso Reyes, así como a las autoridades culturales por propiciar este festival “en el que se respira la cultura en todos sus rincones”.

Bajo la influencia de Ella Fitzgerald y Sarah Vauhghan, Dionne Warwick ha sido la pionera de varios estilos que han influido, a su vez, el sonido y la voz de cantantes contemporáneas, incluyendo a la de su sobrian Whitney Houston.

La cantante originaria de Nueva Jersey, con sofisticados y suaves sonidos, cantó piezas como la legendaria Don´t make me over con la que logró una proyección internacional en 1962, provocando que el público zacatecano y visitante se emocionara.

Con 36 álbumes de estudio, la intérprete que en sus inicios canto música Gospel, Dionne Warwick puso de pie a los asistentes con su éxito I´ll never love this way again, una de las melodías más importantes y reconocidas de la música contemporánea.

Dionne Warwick finalizó su presentación con That´s what friend are for, pieza representativa de su fundación “Dionne and friends” con la que puso de pie a los asistentes que, con reverencias, agradecieron  tan extraordinaria velada de soul, R&B, pop y una voz que le canta al amor.