El senador panista Fernando Elizondo Barragán aseguró que la seguridad pública debe ser la prioridad número uno en la asignación del próximo Presupuesto de Egresos 2010.
El legislador por Nuevo León sostuvo que “todo sale sobrando” si los mexicanos “no tenemos seguridad”.
“La seguridad debe ser prioridad numero uno en el presupuesto porque si no tenemos seguridad para qué queremos carreteras o escuelas, no va a ir la gente y no las va a transitar como está sucediendo en Nuevo León”, insistió.
En conferencia de prensa Elizondo Barragán reconoció que la asignación del presupuesto es facultad exclusiva de la Cámara de Diputados, pero que los senadores pueden dar su opinión al respecto.
Por su parte, Alejandro Zapata Perogordo sostuvo que los gobiernos estatales han recibido “infinidad de recursos económicos para el combate a la delincuencia y que no se ha visto en los resultados”.
“Ya basta de pretextos”, agregó el legislador por San Luis Potosí.
Zapata Perogordo demandó a los gobernadores una mejor coordinación y mayor voluntad política para con la Federación.
Los gobernadores, acusó, “han sacado un enorme cajón de pretextos con pocos resultados; tratan de estirar la mano cuando han tenido muchos recursos económicos y no han puesto voluntad política para abatir la delincuencia del fuero común”.
A pregunta expresa, ambos parlamentarios sostuvieron que pretender regresar al Ejército a sus cuarteles para que abandone la lucha contra el crimen organizado sería “irresponsable” y pondría en riesgo la seguridad nacional, por lo que respaldó plenamente mientras no haya instituciones confiables para poner el orden en estados y municpios.
Asimismo, Santiago Creel Miranda remarcó que quienes proponen el regreso del Ejército a sus cuarteles es porque “no entienden el problema” de seguridad puesto que actualmente “no hay policías confiables” y hacerlo sería una “enorme irresponsabilidad”.
Por su parte, Elizondo Barragán dijo que se tienen que destinar recursos a la seguridad “pero a cuestiones muy puntuales y prioritarias, con programas o acciones que tengan metas medibles y un mecanismo de rendición de cuentas”.
“No se trata de dar cheques en blanco, se trata de asignar recursos para propósitos muy concretos que se puedea medir si se cumplen o no”, dijo el senador nuevoleonés.
Uno de los propósitos prioritarios debe ser tener policías confiables, si no volvemos a lo mismo, le damos dinero al crimen organizado, concluyó.