Luego del homicido de Roberto Elías Martínez, juez de control del Poder Judicial de Zacatecas, adscrito al municipio de Rio Grande, la diputada María Del Mar de Ávila Ibargüengoytia condenó el hecho, y aseguró que Zacatecas vive un estado de sitio con escenas dantescas que se repiten a diario ante la indiferencia e indolencia de las autoridades y órganos de procuración de justicia.
La diputada lamentó que a un año del Plan Zacatecas II, y de la absurda insistencia de la Nueva Gobernanza en que existe mejora en los indicadores de seguridad y baja de homicidios dolosos, “está completamente demostrado que el optimismo y sesgo en la numeralia es un fracaso contundente en materia de seguridad pues la realidad golpea a diario a las y lso zacatecanos, lo mismo que a altos mandos de la Guardia Nacional que a jueces y policías estatales y ministeriales”.
De Ávila Ibargüengoytia urgió al ejecutivo estatal y a las corporaciones de seguridad a replantear la estrategia de seguridad de la mano del Poder Legislativo, y dotar de mayores herramientas y presupuesto a las corporaciones policiacas ante los evidentes resultados que lastiman a miles de familias en Zacatecas.
Detalló que es insostenible que Zacatecas padezca de sufrimiento y eterna zozobra ante el estadillo de las balas que ya se convirtieron en parte de la acústica cotidiana, ya que 47 policías y 96 niños asesinados en lo que va del año, así como los asesinatos del comandante José Silvestre Urzua Padilla general de la Guardia Nacional, así como del juez Roberto Elías Martínez, la fuga de reos del penal varonil y bloqueo de la carretera de cuota Zacatecas-Aguascalientes este domingo y múltiples balaceras en municipios en la entidad y “miles de desplazados a causa de la delincuencia organizada, es evidente que el Estado ha sido rebasado”.